Argentina se encuentra viviendo un momento histórico en el reconocimiento de derechos de las mujeres. El Congreso del vecino país se encuentra analizando la legalización del aborto, proyecto que ya fue aprobado en la Cámara y que ahora debe ser votado por el Senado.
El debate ha generado gran expectación y especial alegría en las feministas que han luchado por años para que este tema avance y sea reconocido. Así la atención también se despliega de manera internacional, entre ellos desde nuestro país, lugar en que este tema también ha sido demandado, pero no ha sido revisado por el Parlamento.
Respecto de lo que está sucediendo en Argentina, Gloria Maira, coordinadora de la Mesa de Acción por el Aborto, expresó que lo vivido en Argentina es muy relevante y contagia de ánimo a toda la región.
“Es super importante porque las argentinas han sido consistentes, inclaudicables en presentar una y otra vez ante el parlamento de su país la despenalización del aborto y la liberalización del castigo de las mujeres por hacer uso de su autonomía reproductiva. Hace dos años tuvimos una derrota porque el Senado no aprobó la ley, pero esta vez ellas insisten y hay muchas probabilidades de que sí sea ley”, señaló.
“Lo que pase en Argentina siento que impregna el continente, es una marea que llega a todas en el continente en esta lucha de tantas décadas por el reconocimiento de nuestra posibilidad de decidir en materia reproductiva”, añadió.
En lo que refiere a la relación y motivación que esto puede tener para un proceso similar en nuestro país donde solo se permite el aborto en 3 causales, Gloria Maira señaló que sin duda lo vivido en Argentina es “super auguroso”.
En esa línea, recordó que luego de que se lograra la despenalización de las 3 causales se presentó un proyecto que busca la despenalización del aborto en las primeras 14 semanas, norma muy parecida a la que hoy se legisla en Argentina, pero que hasta ahora no ha tenido avances. Sin embargo, Maira destacó la importancia del proceso constituyente en este debate pendiente en Chile.
“Evidentemente los procesos en Chile tienen un cariz distinto, estamos en este momento en un proceso constituyente, de formular una nueva Constitución y la expectativa es poder incorporar derechos sexuales y reproductivos en el capítulo de derechos humanos en ese nuevo texto fundamental, y con eso avanzar al reconocimiento de la autonomía sexual y reproductiva de las personas, de las mujeres y cuerpos gestantes en particular. Y lograr luego una legislación que permita un aborto por plazos, que es el tipo de legislación que hay en la gran mayoría de los países hoy en el mundo”, explicó.
Añadió que “la profundización de la democracia, el reconocimiento de las personas como titulares de su vida con capacidad de decidir en ámbitos tan sensibles como la sexualidad y la reproducción se vuelve un imperativo democrático, no es posible volver atrás sobre ese imperativo democrático”.
Una de las características del debate argentino sobre la legalización del aborto ha sido el entendimiento del aborto como un tema de salud, en que su aprobación y correcta ejecución no solo es un derecho para las mujeres sino también parte de la entrega por parte del Estado de una salud integral.
En esa línea legisladores e incluso el presidente Alberto Fernández han reconocido que aun siendo católicos apuestan por la legalización del aborto por ser un tema que no se puede limitar por la creencia, sino que se debe ampliar a su concepción de salud y derechos.
Ante esto, en lo que refiere a si quienes se hagan presente en la Convención Constitucional, especialmente desde los partidos políticos pues el espacio para la independencia se ha hecho mucho más complejo, estarán a la altura de una visión amplia sobre esta norma, Gloria Maira señaló que la clase política debe actuar en coherencia con lo que ha profesado.
“De los partidos políticos progresistas y de izquierda, de los liberales, de quienes han esgrimido como parte de su visión de país la libertad de las personas los derechos y liberad de las personas de decidir sobre sus vidas, espero sean coherentes con ese pronunciamiento. Yo no espero altura de miras, espero coherencia y la coherencia significa que si yo reconozco derechos y libertades de las personas para decidir sobre su vida, sobre sus opciones a tomar las decisiones que mejor crean para el desarrollo de sus capacidades para una vida más feliz, puedan hacerlo”, dijo.
Además, la coordinadora de la Mesa de Acción por el Aborto reconoció que la lucha por el reconocimiento de los derechos sexuales y reproductivos será una pelea dura en el proceso constituyente: “Este es un proceso en que hay disputas de visión de sociedad y esas disputas se están viendo paso a paso”, expresó.
“Es importante que los sectores sociales y políticos que están en favor de una profundización de la democracia, de mayores derechos y libertades y de la creación de condiciones para que las personas podamos ejercer esos derechos y libertades, vayamos en alianza porque la pelea va a ser dura, muy dura”, concluyó Gloria Maira.