Los Invasores: el clásico de Egon Wolff regresa a los escenarios y se impregna de la revuelta social

En esta nueva versión, la compañía Teatro Sur presenta un montaje que opera como un dispositivo contemporáneo, en donde música, escenografía e iluminación tensionan el texto original de 1963. "El teatro tiene que hacerse cargo de cómo las transformaciones culturales afectan a las artes en general", dijo Ernesto Orellana, director de la pieza.

En esta nueva versión, la compañía Teatro Sur presenta un montaje que opera como un dispositivo contemporáneo, en donde música, escenografía e iluminación tensionan el texto original de 1963. "El teatro tiene que hacerse cargo de cómo las transformaciones culturales afectan a las artes en general", dijo Ernesto Orellana, director de la pieza.

El 19 de octubre de 1963, Víctor Jara, en su calidad de director teatral, estrenó en el Teatro Experimental de la Universidad de Chile, hoy Teatro Nacional Chileno, la obra Los Invasores del dramaturgo Egon Wolff. 

El montaje contaba la historia de una familia acomodada, Los Meyer, quienes, a raíz de la irrupción de una turba proveniente del otro lado del río, comenzaban a defender su posición frente a la llegada de los marginados que, decididos, esperaban crear un nuevo orden social. 

Hoy, esta pieza icónica del teatro nacional regresa a los escenarios de la mano de la compañía Teatro Sur que, bajo la dirección de Ernesto Orellana, presenta un montaje impregnado de la revuelta social y el uso de las tecnologías. 

Con un elenco integrado por Tito Bustamante, Ximena Rivas, Nicolás Pavez, Tamara Ferreira, Nicolás Zarate, Ymar Fuentes y Amada Ceballos, esta nueva versión dialoga directamente con el presente y con el aniversario de un nuevo 18 de octubre. 

Ernesto Orellana, director del montaje, sostuvo que está versión del clásico teatral surgió hace casi tres años, de manera previa al estallido social y frente a los antagonismos que fueron irrumpiendo en la sociedad durante los últimos años como las luchas sexodisidentes, las demandas feministas y las pulsiones provenientes desde el ámbito de la educación, la salud, el agua y el territorio.

“Para nosotros y nosotras es súper importante agitar y colaborar, como muchos colegas de las artes y las humanidades, a pulsar la memoria política de la revuelta de octubre de 2019. Nos interesaba hacerlo en octubre, porque es un aporte volver a traer esa memoria desde el teatro, porque no podemos olvidarlo y hay un escenario muy conservador que quiere que esas memorias se oculten, se invisibilicen, se callen y fracasen”, dijo el director teatral.  

“Y, ¿por qué no hacer otra obra? Como director siempre he pensado que tenemos que revisitar nuestro patrimonio cultural. Este país, en general, olvida mucho su memoria y, en este cambio de paradigma a propósito de la Constituyente, es tremendamente necesario y urgente entendernos como sociedad, impulsar nuevos imaginarios y revisitar nuestro patrimonio cultural”, añadió. 

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La obra cuenta con una puesta en escena que opera como un dispositivo contemporáneo que se aleja de la retórica clásica del realismo. En esa línea, el proyecto reconoce las formas de construir teatralidad hoy, utilizando técnicas propias del video mapping. Así, tanto la música, como la escenografía y la iluminación tensionan el texto original de 1963. 

“El resultado es un dispositivo metafórico, poético, simbólico, que, desde distintas capas estéticas, dan cuenta también de cómo es el teatro hoy. Es decir, estamos otorgándole a la puesta en escena el valor que la teatralidad pulsa más allá de las dramaturgias”, indicó Orellana. 

“Han pasado casi 60 años y el teatro tiene que hacerse cargo de cómo las transformaciones culturales afectan a las artes en general. Además, como compañía siempre hemos escapado un tanto de las retóricas de la tradición del teatro burgués, porque no nos interesa. Nos interesa más bien pensarnos desde la tradición del teatro político”, agregó el director del montaje . 

Para la actriz Ximena Rivas esta pieza es tremendamente contingente y revela que, pese al paso del tiempo, los problemas sociales y políticos abordados en 1963 persisten: “Es sorprendente que, pasados 58 años, sean las mismas temáticas las que están presentes en nuestra sociedad en cuanto a la desigualdad, en cuanto al sentirnos amenazados desde el miedo al que se nos pueden quitar algo”. 

“La compañía Teatro Sur, en sus diez años de aniversario, se hace cargo de este momento histórico. Esa es la novedad que tiene este montaje que se hace presente, totalmente, con las temáticas en conflicto que están en la sociedad y que están en nuestras discusiones”, afirmó.

afiche (1)Esta nueva versión de Los Invasores se estrenará este 16 de octubre en el Teatro Mori Recoleta (Bellavista #77, Recoleta) y estará en cartelera hasta el 28 de noviembre con funciones los días sábados y domingos a las 20:00 horas. Las entradas van desde los $11.000. 

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