Convencional Núñez, tras votación de Medio Ambiente: "Sorprende el desconocimiento del Partido Socialista"

El representante indicó que el texto se trabajó hasta llegar a uno de consenso, por lo que no se justifica la forma en que votaron los convencionales PS. De todas formas, dijo confiar en la madurez de sus pares para llegar a nuevos acuerdos.

El representante indicó que el texto se trabajó hasta llegar a uno de consenso, por lo que no se justifica la forma en que votaron los convencionales PS. De todas formas, dijo confiar en la madurez de sus pares para llegar a nuevos acuerdos.

En conversación con los periodistas Juanita Rojas y Claudio Medrano en la primera edición de Radioanálisis, el convencional constituyente, militante del FRVS e intregrante de la Comisión de Medio Ambiente, Nicolás Núñez, abordó el rechazo general del segundo informe de la Comisión 5, el que fue declinado con 98 votos a favor, 46 en contra y 8 abstenciones y que contemplaba estatutos constitucionales del agua en todas sus fases; de la minería, entre otros temas relativos a la soberanía alimentaria y a los derechos humanos y ambientales.

Un portazo que Nuñez aludió particularmente a los votos en contra del Colectivo Socialista y algunos de pueblos originarios, lo que radicó en una sorpresa para el representante del distrito 16 toda vez que “se habían creado espacios de consenso de creación de normas”, en los que participaron los convencionales señalados. Son estos acuerdos los que se desconocen en el pleno, pese a que existía un compromiso de aprobar el informe, señaló el abogado.

“Trabajamos en conjunto las normas. Yo mismo trabajé con ellos, el señor Tomás Laibe estuvo en la mesa de consenso de creación de las normas del informe, nos juntamos en el Palacio Pereira a trabajar las normas, se escuchó al partido en particular con respecto a cuáles eran sus exigencias para la elaboración de las mismas normas. De hecho, dentro de la Comisión de Medio Ambiente siempre hay que estar haciendo un equilibrio entre las posiciones que puedan ser más radicales, de las posiciones que son quizás más concretas y más reales”, indicó.

Sin perjuicio de lo anterior, Núñez consideró que han habido ataques y discursos incendiarios contra los socialistas de la Convención que podrían haber dificultado el objetivo de llegar a un entendimiento. “Ayer hubo discursos de la convencional Elsa Labraña atacando derechamente al Partido Socialista y al final terminan dándole la razón y la excusa perfecta a dichos partidos para que se desconozca la negociación“, reparó, señalando que esto atenta contra una estrategia de concordancia política.

Abundando en las razones por las cuales ha costado generar acuerdos respecto al contenido que emanó de la comisión de Medio Ambiente, Núñez hizo una diferencia en el ejercicio de definición de normas entre el primer y segundo informe y es que preliminarmente, la conformación mayoritaria de dirigentes ecologistas de la Comisión devino en que las normas contempladas en dicho insumo provinieron directamente de los movimientos ecologistas. No obstante el criterio con el que se definieron, fue reformulado al no hacerle sentido al pleno, reparó Núñez.

“Nosotros hicimos el ejercicio como comisión de entender que había que darle un criterio de realidad y que si bien es cierto queríamos cambiar un montón de cosas ahora, va a ser más bien el Chile de ahora el que va a decidir el texto de la nueva Constitución y no el Chile del futuro, entonces muchas cosas que queríamos hacer que la va a decidir el Chile del futuro pero el Chile de ahora a lo mejor no está preparado en muchas materias ecologistas de cierta forma o radicalmente”, sostuvo.

Otra complejidad de llegar a consensos radicó en lo sustancial del debate de la Comisión de Medio Ambiente, agregó, toda vez que “lo que se juega ahí es la existencia de la especie humana y en cómo enfrentamos la crisis climática”. Así las cosas, enfatizó que tras el rechazo del primer informe, esta urgencia fue morigerada.

Nosotros tomamos el guante y ahora hablamos y salimos desde la Comisión de Medio Ambiente a buscar con los otros colectivos y con los otros partidos las normas de consenso y eso es lo que me extraña, que el ejercicio se hizo (…) Una de las críticas que se hizo al informe, hablando en lenguaje más coloquial, era que había quedado hasta más amarillo incluso que el anterior. Se hizo el trabajo de llegar a normas de consenso, por eso me sorprende el desconocimiento del partido Socialista en particular”.

Pese a lo anterior, el convencional dijo no compartir las acusaciones de traición que emanaron posteriormente, considerando que es necesario mantener la unidad en las fuerzas para concitar las mayorías en el pleno, por ende consideró que habrá que ahondar en los requerimientos de los socialistas para modificar y construir normas. Sin embargo dijo mantenerse preocupado de como esto afecta al cronograma de la Convención.

“Hay un enemigo implacable de la Convención desde el día uno, que es un enemigo invisible que siempre está al asecho que es el tiempo y esto en particular le quita tiempo a la comisión de Armonización. Creo que es algo que importa demasiado, porque retrasa a la Comisión en particular y ahora en tiempo récord vamos a tener que hacer, con el sustrato y el contenido escencial, construir un nuevo informe que logre pasar los 103 votos”.

Así las cosas, dijo confiar “plenamente en la madurez de los convencionales, cada uno individualmente considerado, para sumarnos al trabajo”.





Presione Escape para Salir o haga clic en la X