Después de que se quebrara la mesa de trabajo con las autoridades para definir mejoras a la fiscalización de la Tarjeta Nacional Estudiantil (TNE), sigue el paro de la locomoción pública en la región de Valparaíso que se ha extendido por más de 13 horas con una amplia adhesión de los conductores, estimada en cerca de un noventa por ciento.
El presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores del Transporte de Pasajeros, Oscar Canteros, explicó que están pidiendo una compensación por las pérdidas que habría generado la extensión, de la TNE, de forma paralela al subsidio que se creó el 2010 que es para los empresarios, es decir, no va en directo beneficio de los choferes.
Dado el respaldo del paro el gobierno regional debió establecer medidas de contingencia para permitir el traslado de los usuarios. El ministro de Transporte, Andrés Gómez-Lobo detalló que se levantaron todas las prohibiciones a los taxis-colectivos y buses rurales para entrar a la ciudad y se reforzaron los servicios de tren-bus de Merval. Además, afirmó que existen mesas de trabajo por lo que no ve una justificación verdadera para esta movilización.
Por otro lado, durante la mañana fue apedreado un bus, ya que el chofer de la máquina decidió no adherir al paro y salió a realizar su recorrido normalmente. Ante esto, el gobernador de Marga Marga, Gianni Rivera, afirmó que se dispuso de personal policial para custodiar las garitas y sostuvo que van a ser muy duros y buscarán acciones legales contra quienes quieran hacer desórdenes y amenazar a los que están trabajando. Mientras, otras autoridades han llamado a los dirigentes a retomar el diálogo que mantenían.
La Intendencia de Valparaíso comunicó que multará a los otros medios de transporte que sean sorprendidos subiendo el valor de los pasajes, abusando de las complicaciones que genera el paro. En las próximas horas el organismo emitirá un balance general sobre esta jornada de paralización.