Este martes, la Comisión de Salud del Senado aprobó por 3 votos contra 2 la idea de legislar el proyecto de aborto en tres causales.
El proyecto que despenaliza y regula la interrupción del embarazo en casos de riesgo de vida de la madre, violación e inviabilidad fetal. Ahora pasará a la comisión de Constitución para continuar su trámite legislativo, posteriormente, en la cámara alta.
En la votación, Fulvio Rossi (PS), Guido Girardi (PPD) y Carolina Goic (DC) apoyaron la iniciativa. En tanto Jacqueline Van Rysselberghe (UDI) y Francisco Chahuán (RN) manifestaron su oposición al proyecto de ley.
La presidenta de la comisión, senadora Carolina Goic, manifestó que de aprobarse este proyecto, nadie estará obligado a abortar. Agregó que “no se puede actuar con vendas en los ojos y aquí hay una realidad de muchas mujeres que se enfrentan a la situación de interrumpir su embarazo”, aunque calificó de “insuficiente” el plan de acompañamiento que contempla la norma.
Por su parte, la senadora Jacqueline Van Rysselberghe dijo que, de acuerdo a los argumentos que hacían referencia al aborto terapéutico existente hasta el año 1989, “el aborto no tiene nada de terapéutico, es un acto que termina con la muerte del feto”, aduciendo a la relativización del derecho a la vida que, según indicó, supone este proyecto.
En tanto, el senador de Renovación Nacional Francisco Chahuán, sostuvo que el aborto es una señal de que se está llegando tarde a la solución del problema e indicó que la mayor cantidad de los casos que terminan en aborto son por presión del entorno. En consecuencia, apostó por el acompañamiento a las mujeres, la educación sexual temprana y el fomento de uso de anticonceptivos, antes de la aplicación esta medida.
“Hoy se ha hecho un retroceso muy importante en términos de la protección de Derechos Humanos en nuestro país. Una sociedad democrática debe cuidar los derechos de cada uno de sus miembros y reconocemos que finalmente los derechos de una persona terminan cuando comienzan los de otro. En ese otro que está en el vientre materno hay un ser único, irrepetible y trascendente”, dijo.
Por otro lado, la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Claudia Pascual, agradeció entre lágrimas el avance de la iniciativa: “Queremos dar cuenta de un debate que ha sido bastante extenso, que ha logrado escuchar distintas opiniones, que remite a distintas convicciones personales de los chilenos y que, sin embargo, ha tenido en cuenta la necesidad de poder avanzar en el entendido que necesitamos como Estado, Gobierno y sociedad poder dar respaldo a las distintas convicciones que tienen las niñas, adolescentes y mujeres de nuestro país”, manifestó.
En cuanto a plazos, la Secretaria de Estado aseguró que se mantiene la idea de tramitar la iniciativa en totalidad en el periodo legislativo del 2016.
Ahora el proyecto será revisado en general por los senadores de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, para luego pasar a ser estudiado por la Sala de la Cámara Alta.
Este martes, la Comisión de Salud del Senado aprobó por 3 votos contra 2 la idea de legislar el proyecto de aborto en tres causales.
El proyecto que despenaliza y regula la interrupción del embarazo en casos de riesgo de vida de la madre, violación e inviabilidad fetal. Ahora pasará a la comisión de Constitución para continuar su trámite legislativo, posteriormente, en la cámara alta.
En la votación, Fulvio Rossi (PS), Guido Girardi (PPD) y Carolina Goic (DC) apoyaron la iniciativa. En tanto Jacqueline Van Rysselberghe (UDI) y Francisco Chahuán (RN) manifestaron su oposición al proyecto de ley.
La presidenta de la comisión, senadora Carolina Goic, manifestó que de aprobarse este proyecto, nadie estará obligado a abortar. Agregó que “no se puede actuar con vendas en los ojos y aquí hay una realidad de muchas mujeres que se enfrentan a la situación de interrumpir su embarazo”, aunque calificó de “insuficiente” el plan de acompañamiento que contempla la norma.
Por su parte, la senadora Jacqueline Van Rysselberghe dijo que, de acuerdo a los argumentos que hacían referencia al aborto terapéutico existente hasta el año 1989, “el aborto no tiene nada de terapéutico, es un acto que termina con la muerte del feto”, aduciendo a la relativización del derecho a la vida que, según indicó, supone este proyecto.
En tanto, el senador de Renovación Nacional Francisco Chahuán, sostuvo que el aborto es una señal de que se está llegando tarde a la solución del problema e indicó que la mayor cantidad de los casos que terminan en aborto son por presión del entorno. En consecuencia, apostó por el acompañamiento a las mujeres, la educación sexual temprana y el fomento de uso de anticonceptivos, antes de la aplicación esta medida.
“Hoy se ha hecho un retroceso muy importante en términos de la protección de Derechos Humanos en nuestro país. Una sociedad democrática debe cuidar los derechos de cada uno de sus miembros y reconocemos que finalmente los derechos de una persona terminan cuando comienzan los de otro. En ese otro que está en el vientre materno hay un ser único, irrepetible y trascendente”, dijo.
Por otro lado, la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Claudia Pascual, agradeció entre lágrimas el avance de la iniciativa: “Queremos dar cuenta de un debate que ha sido bastante extenso, que ha logrado escuchar distintas opiniones, que remite a distintas convicciones personales de los chilenos y que, sin embargo, ha tenido en cuenta la necesidad de poder avanzar en el entendido que necesitamos como Estado, Gobierno y sociedad poder dar respaldo a las distintas convicciones que tienen las niñas, adolescentes y mujeres de nuestro país”, manifestó.
En cuanto a plazos, la Secretaria de Estado aseguró que se mantiene la idea de tramitar la iniciativa en totalidad en el periodo legislativo del 2016.
Ahora el proyecto será revisado en general por los senadores de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, para luego pasar a ser estudiado por la Sala de la Cámara Alta.
Este martes, la Comisión de Salud del Senado aprobó por 3 votos contra 2 la idea de legislar el proyecto de aborto en tres causales.
El proyecto que despenaliza y regula la interrupción del embarazo en casos de riesgo de vida de la madre, violación e inviabilidad fetal. Ahora pasará a la comisión de Constitución para continuar su trámite legislativo, posteriormente, en la cámara alta.
En la votación, Fulvio Rossi (PS), Guido Girardi (PPD) y Carolina Goic (DC) apoyaron la iniciativa. En tanto Jacqueline Van Rysselberghe (UDI) y Francisco Chahuán (RN) manifestaron su oposición al proyecto de ley.
La presidenta de la comisión, senadora Carolina Goic, manifestó que de aprobarse este proyecto, nadie estará obligado a abortar. Agregó que “no se puede actuar con vendas en los ojos y aquí hay una realidad de muchas mujeres que se enfrentan a la situación de interrumpir su embarazo”, aunque calificó de “insuficiente” el plan de acompañamiento que contempla la norma.
Por su parte, la senadora Jacqueline Van Rysselberghe dijo que, de acuerdo a los argumentos que hacían referencia al aborto terapéutico existente hasta el año 1989, “el aborto no tiene nada de terapéutico, es un acto que termina con la muerte del feto”, aduciendo a la relativización del derecho a la vida que, según indicó, supone este proyecto.
En tanto, el senador de Renovación Nacional Francisco Chahuán, sostuvo que el aborto es una señal de que se está llegando tarde a la solución del problema e indicó que la mayor cantidad de los casos que terminan en aborto son por presión del entorno. En consecuencia, apostó por el acompañamiento a las mujeres, la educación sexual temprana y el fomento de uso de anticonceptivos, antes de la aplicación esta medida.
“Hoy se ha hecho un retroceso muy importante en términos de la protección de Derechos Humanos en nuestro país. Una sociedad democrática debe cuidar los derechos de cada uno de sus miembros y reconocemos que finalmente los derechos de una persona terminan cuando comienzan los de otro. En ese otro que está en el vientre materno hay un ser único, irrepetible y trascendente”, dijo.
Por otro lado, la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Claudia Pascual, agradeció entre lágrimas el avance de la iniciativa: “Queremos dar cuenta de un debate que ha sido bastante extenso, que ha logrado escuchar distintas opiniones, que remite a distintas convicciones personales de los chilenos y que, sin embargo, ha tenido en cuenta la necesidad de poder avanzar en el entendido que necesitamos como Estado, Gobierno y sociedad poder dar respaldo a las distintas convicciones que tienen las niñas, adolescentes y mujeres de nuestro país”, manifestó.
En cuanto a plazos, la Secretaria de Estado aseguró que se mantiene la idea de tramitar la iniciativa en totalidad en el periodo legislativo del 2016.
Ahora el proyecto será revisado en general por los senadores de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, para luego pasar a ser estudiado por la Sala de la Cámara Alta.
