A los pies del cerro Ñielol, en el Pabellón El Amor de Chile el Presidente Sebastián Piñera presentó el Plan Impulso Araucanía, iniciativa que busca implementar una serie de políticas públicas en torno al reconocimiento de pueblos indígenas, su participación y el desarrollo económico, social y turístico de la Región de la Araucanía.
El plan contempla 491 proyectos, contará con una inversión pública de 8 mil millones de dólares entre el período 2018 a 2026 y forma parte de los cinco acuerdos nacionales que el Presidente prometió cuando asumió en este segundo período.
Según indicó el Mandatario en su discurso, el Acuerdo por el Desarrollo y la Paz en La Araucanía, dentro del cual se incluye el Plan Impulsa Araucanía, es el primer paso para el mejoramiento de las condiciones de vida de la región.
“No es el fin, es el comienzo, no es la respuesta final, es una propuesta que esperamos pueda ser analizada y enriquecida por toda la sociedad civil y la comunidad, y los habitantes de esta maravillosa Región de La Araucanía”.
Entre las propuestas más destacadas se encuentran el reconocimiento constitucional a los pueblos indígenas, una ley de cuotas mínimas de participación política de pueblos originarios, y poner suma urgencia al Ministerio y Consejo de Pueblos Indígenas, proyectos que actualmente se encuentran en segundo trámite constitucional en el Senado.
Además, el Presidente anunció cambios a la ley indígena y la posibilidad de arrendar y celebrar distintos tipos de contrato para el uso de las tierras: “Vamos a buscar mecanismos que flexibilicen y mejoren la capacidad de poder disponer de sus tierras de nuestros pueblos originarios, facilitando mecanismos como arriendos, medierías, alianzas estratégicas, pero siempre velando porque la propiedad de la tierra indígena siga en manos indígenas, ya sea en forma individual o en forma colectiva”.
A esto se suma también elaborar un instructivo presidencial de lengua y ceremonia intercultural que permita a los órganos del Estado y a sus funcionarios donde habitan mayormente los pueblos indígenas, relacionarse reconociendo y respetando sus tradiciones y su cultura. También generar una mesa de trabajo con historiadores indígenas y no indígenas para revisar los contenidos indígenas de los textos escolares de historia y potenciar el rol de las autoridades tradicionales de los pueblos indígenas, así como también la atención de medicina mapuche en los centros de salud de la región.
Por su parte el obispo de Temuco, Héctor Vargas, quien participó en varias de las reuniones que se realizaron para elaborar este acuerdo destacó que sea a largo plazo y que abarque iniciativas de múltiples sectores. El sacerdote aseguró que, a diferencia de iniciativas de otros gobiernos, esta es “integral”, pues aborda múltiples focos y no busca solo solucionar un problema coyuntural.
En la ceremonia estuvieron presentes diversas autoridades nacionales y de la región, además de representantes de diversas comunidades indígenas de la zona. Sin embargo, a pesar del apoyo que ha tenido la iniciativa, algunos actores políticos y del mundo mapuche han mirado con desconfianza algunas de las propuestas.
El consejero indígena José Millalén comentó que, aunque algunas medidas suenan prometedoras, se debe estar atentos a una posible “letra chica”, sobre todo con la posibilidad de arriendo de tierras.
“Ese tema nosotros se lo planteamos al ministro de Desarrollo Social, que no era una de las mejores ideas integrar esas tierras así al mercado, porque incentivar el arriendo en el fondo en el mediano y largo plazo lo que puede hacer es incentivar la dependencia de nuestra gente de quienes poseen más para invertir”, explicó Millalén.
Desde la oposición el diputado PPD Ricardo Celis, representante de la zona, señaló que se busca “alcanzar la paz abriendo la billetera”, a lo que agregó que las decisiones de inversión ni siquiera se hicieron escuchando a las comunidades indígenas, sino que solo a los empresarios de la zona.
Por su parte, varias comunidades han convocado a una marcha para este miércoles en Temuco en rechazo al Plan y por la restitución y defensa del territorio, entre ellas la comunidad Antonio Millalen, Asociación de comunidades de Puren Aliwen Antileo, Comunidad Didaico, Triguen Belén Curamil, werken del logko (PPM) Alberto Curamil, Curacautin Fernando Huaiquil Paillal, Lof Mañiuko, Galvarino José Cheuquepan, lof Weñivales, Curacautin Sonia Lemunao, Comunidad Manuel Lemunao, Pitrufken Ingrid Coñoman, entre otros.