Pablo Stefanoni, historiador argentino: “Las derechas radicales funcionan mejor en la oposición”
El autor del libro ¿La rebeldía se volvió de derecha? apuntó a la especial relación entre los jóvenes y los líderes de ultraderecha como Javier Milei. Además, planteó que para gobernar, el nuevo presidente de Argentina tendrá que cambiar su estilo.
Diario UChile
Miércoles 13 de diciembre 2023 12:13 hrs.
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De acuerdo al historiador argentino y autor del libro ¿La rebeldía se volvió de derecha?, Pablo Stefanoni, “en Argentina nadie entiende muy bien” cómo fue que Javier Milei llegó a la presidencia.
En conversación con la primera edición de Radioanálisis, Stefanoni abordó la meteórica carrera de Milei: “En solo dos años pasó de ser un economista televisivo, entró al Congreso y se transformó en presidente sin estructura política, sin tener ni alcaldías ni gobernaciones y con un pequeño bloque parlamentario”, señaló.
“Es realmente la primera vez que un outsider real gana las elecciones en Argentina y creo que eso tiene que ver con el hartazgo social, con una crisis muy profunda y un estilo de Milei, un discurso contra la casta política que hizo eco en una parte de la población muy grande, 55% de los votos en la segunda vuelta y muy heterogéneo socialmente”, agregó.
De todas maneras, el historiador enfatizó en la particular relación del nuevo mandatario con los jóvenes argentinos. A ellos los habría atraído con “un discurso muy radical, sumado a su pelo revuelto y su estética rockera”.
“Hay que decir también que para los más jóvenes, en Argentina se puede votar desde los 16 años, el kirchnerismo duró ese tiempo. Si uno mira en los últimos 16 años, con un intervalo de cuatro que gobernó la derecha, fueron 12 años de Cristina y Nestor Kirchner y cuatro de Alberto Fernández, entonces, para muchos jóvenes prácticamente toda su vida fue el kirchnerismo”, indicó.
Stefanoni además relacionó el caso argentino con lo que está ocurriendo en otras partes del mundo. A su juicio, hay “una situación global donde las razones de la inconformidad son muy diversas, puede ser la inflación, en Chile se habló mucho de la inseguridad, en Europa de la cuestión del Islam. Varían mucho las razones de la inconformidad de una parte de la población, pero parece ser que hoy, en muchos lugares de Occidente, ese estado de ánimo de querer patear el tablero, de querer votar contra el estatus quo, de revelarse de algún modo contra las elites políticas, culturales, es más canalizado por unos tipos de derecha más radicales que en el pasado”, afirmó.
En esa misma línea, el historiador estimó que el vuelco hacia la derecha “tiene que ver con que el progresismo quizás es visto hoy como estatus quo y hay una especie de capitalismo global que asumió un discurso progresista en lo cultural, aunque es muy desigualitario en lo político”, opinó.
“La izquierda a veces aparece como muy sermonera, con un cierto aire de superioridad moral que genera rechazo y yo creo que también hay algo que es un poco más abstracto, pero que es una fuerte crisis de la idea de futuro, cada vez más el futuro rima con catastrofismo, con distopía”, advirtió.
Por otra parte, consultado respecto a lo que se puede esperar del Gobierno de Milei, Stefanoni aseguró que las derechas radicales “funcionan mejor en la oposición posiblemente que en el Gobierno, porque muchos de los problemas que hay tampoco son fáciles de resolver”.
Asimismo, planteó que Milei deberá cambiar, teniendo en cuenta el cargo que ostenta. “Conocemos un Milei economista muy radical en la televisión, conocemos un Milei candidato, pero no conocemos el Milei presidente, que sin duda va a tener que ser otro, porque las condiciones políticas, económicas, institucionales, lo van a obligar. No sé si mejor o peor, pero será otro”, concluyó.
Revisa la entrevista completa aquí:
De acuerdo al historiador argentino y autor del libro ¿La rebeldía se volvió de derecha?, Pablo Stefanoni, “en Argentina nadie entiende muy bien” cómo fue que Javier Milei llegó a la presidencia.
En conversación con la primera edición de Radioanálisis, Stefanoni abordó la meteórica carrera de Milei: “En solo dos años pasó de ser un economista televisivo, entró al Congreso y se transformó en presidente sin estructura política, sin tener ni alcaldías ni gobernaciones y con un pequeño bloque parlamentario”, señaló.
“Es realmente la primera vez que un outsider real gana las elecciones en Argentina y creo que eso tiene que ver con el hartazgo social, con una crisis muy profunda y un estilo de Milei, un discurso contra la casta política que hizo eco en una parte de la población muy grande, 55% de los votos en la segunda vuelta y muy heterogéneo socialmente”, agregó.
De todas maneras, el historiador enfatizó en la particular relación del nuevo mandatario con los jóvenes argentinos. A ellos los habría atraído con “un discurso muy radical, sumado a su pelo revuelto y su estética rockera”.
“Hay que decir también que para los más jóvenes, en Argentina se puede votar desde los 16 años, el kirchnerismo duró ese tiempo. Si uno mira en los últimos 16 años, con un intervalo de cuatro que gobernó la derecha, fueron 12 años de Cristina y Nestor Kirchner y cuatro de Alberto Fernández, entonces, para muchos jóvenes prácticamente toda su vida fue el kirchnerismo”, indicó.
Stefanoni además relacionó el caso argentino con lo que está ocurriendo en otras partes del mundo. A su juicio, hay “una situación global donde las razones de la inconformidad son muy diversas, puede ser la inflación, en Chile se habló mucho de la inseguridad, en Europa de la cuestión del Islam. Varían mucho las razones de la inconformidad de una parte de la población, pero parece ser que hoy, en muchos lugares de Occidente, ese estado de ánimo de querer patear el tablero, de querer votar contra el estatus quo, de revelarse de algún modo contra las elites políticas, culturales, es más canalizado por unos tipos de derecha más radicales que en el pasado”, afirmó.
En esa misma línea, el historiador estimó que el vuelco hacia la derecha “tiene que ver con que el progresismo quizás es visto hoy como estatus quo y hay una especie de capitalismo global que asumió un discurso progresista en lo cultural, aunque es muy desigualitario en lo político”, opinó.
“La izquierda a veces aparece como muy sermonera, con un cierto aire de superioridad moral que genera rechazo y yo creo que también hay algo que es un poco más abstracto, pero que es una fuerte crisis de la idea de futuro, cada vez más el futuro rima con catastrofismo, con distopía”, advirtió.
Por otra parte, consultado respecto a lo que se puede esperar del Gobierno de Milei, Stefanoni aseguró que las derechas radicales “funcionan mejor en la oposición posiblemente que en el Gobierno, porque muchos de los problemas que hay tampoco son fáciles de resolver”.
Asimismo, planteó que Milei deberá cambiar, teniendo en cuenta el cargo que ostenta. “Conocemos un Milei economista muy radical en la televisión, conocemos un Milei candidato, pero no conocemos el Milei presidente, que sin duda va a tener que ser otro, porque las condiciones políticas, económicas, institucionales, lo van a obligar. No sé si mejor o peor, pero será otro”, concluyó.
Revisa la entrevista completa aquí:
De acuerdo al historiador argentino y autor del libro ¿La rebeldía se volvió de derecha?, Pablo Stefanoni, “en Argentina nadie entiende muy bien” cómo fue que Javier Milei llegó a la presidencia.
En conversación con la primera edición de Radioanálisis, Stefanoni abordó la meteórica carrera de Milei: “En solo dos años pasó de ser un economista televisivo, entró al Congreso y se transformó en presidente sin estructura política, sin tener ni alcaldías ni gobernaciones y con un pequeño bloque parlamentario”, señaló.
“Es realmente la primera vez que un outsider real gana las elecciones en Argentina y creo que eso tiene que ver con el hartazgo social, con una crisis muy profunda y un estilo de Milei, un discurso contra la casta política que hizo eco en una parte de la población muy grande, 55% de los votos en la segunda vuelta y muy heterogéneo socialmente”, agregó.
De todas maneras, el historiador enfatizó en la particular relación del nuevo mandatario con los jóvenes argentinos. A ellos los habría atraído con “un discurso muy radical, sumado a su pelo revuelto y su estética rockera”.
“Hay que decir también que para los más jóvenes, en Argentina se puede votar desde los 16 años, el kirchnerismo duró ese tiempo. Si uno mira en los últimos 16 años, con un intervalo de cuatro que gobernó la derecha, fueron 12 años de Cristina y Nestor Kirchner y cuatro de Alberto Fernández, entonces, para muchos jóvenes prácticamente toda su vida fue el kirchnerismo”, indicó.
Stefanoni además relacionó el caso argentino con lo que está ocurriendo en otras partes del mundo. A su juicio, hay “una situación global donde las razones de la inconformidad son muy diversas, puede ser la inflación, en Chile se habló mucho de la inseguridad, en Europa de la cuestión del Islam. Varían mucho las razones de la inconformidad de una parte de la población, pero parece ser que hoy, en muchos lugares de Occidente, ese estado de ánimo de querer patear el tablero, de querer votar contra el estatus quo, de revelarse de algún modo contra las elites políticas, culturales, es más canalizado por unos tipos de derecha más radicales que en el pasado”, afirmó.
En esa misma línea, el historiador estimó que el vuelco hacia la derecha “tiene que ver con que el progresismo quizás es visto hoy como estatus quo y hay una especie de capitalismo global que asumió un discurso progresista en lo cultural, aunque es muy desigualitario en lo político”, opinó.
“La izquierda a veces aparece como muy sermonera, con un cierto aire de superioridad moral que genera rechazo y yo creo que también hay algo que es un poco más abstracto, pero que es una fuerte crisis de la idea de futuro, cada vez más el futuro rima con catastrofismo, con distopía”, advirtió.
Por otra parte, consultado respecto a lo que se puede esperar del Gobierno de Milei, Stefanoni aseguró que las derechas radicales “funcionan mejor en la oposición posiblemente que en el Gobierno, porque muchos de los problemas que hay tampoco son fáciles de resolver”.
Asimismo, planteó que Milei deberá cambiar, teniendo en cuenta el cargo que ostenta. “Conocemos un Milei economista muy radical en la televisión, conocemos un Milei candidato, pero no conocemos el Milei presidente, que sin duda va a tener que ser otro, porque las condiciones políticas, económicas, institucionales, lo van a obligar. No sé si mejor o peor, pero será otro”, concluyó.
