En el cerro El Minero es donde se pretende instalar esta planta de acopio a la que los vecinos y organizaciones ambientales de la sexta región le hicieron frente.
En marzo denunciaron que Codelco, dueña del proyecto, retrasó la difusión de antecedentes relevantes para evitar que la ciudadanía se organizara en contra de esta planta tóxica, la que según ellos contaminará cuencas y valles de la localidad.
Pero esta planta lo que haría es formalizar una situación que ha estado vigente, tal como indicó Carmen Denis, presidenta del Comité Ambiental de Machalí quien relató la forma en la que se conformó esta comisión que estudiará las implicancias para la salud y el desarrollo social del proyecto de la empresa estatal.
“En realidad el arsénico estuvo 17 años en el cerro El Minero, literalmente encima de la tierra, con bolsas de plástico, sin ningún tipo de resguardo, porque en esos años la ley lo permitía. Yo propuse crear un comité o un grupo para oponernos a este proyecto y que nos dijeran claramente de qué se trataba. Entonces, Codelco nos llamó a una mesa de trabajo y de diálogo”, explicó.
La dirigenta señaló que están recién en conversaciones, aunque reconoció que han visto muy buena disposición de Codelco para colaborar con el trabajo. Incluso, el gerente de sustentabilidad de la estatal, Flavio Angelini, comprometió un análisis permanente de las materias sobre polución que afectan a los vecinos.
Esto fue posible gracias a la mediación de los trabajadores mineros del sector. La Confederación de Trabajadores del Cobre (CTC) fue generando el diálogo con la gerencia y propiciando las condiciones.
De hecho, su director nacional, José Irarrázaval, afirmó que la instancia buscará proyectar una política permanente y crítica respecto de todos los proyectos nocivos para la ciudadanía.
“Esta comisión viene para quedarse, y en ese contexto vamos a ver todos los temas que estén relacionados con el medioambiente, no solamente con el arsénico, sino también con la emanación del ácido que sale de las chimeneas en Caletones y el tema de las aguas. Pero la coyuntura específica que nos movió a formar la comisión es el tema del arsénico”, aclaró.
El dirigente añadió que en la medida que se vayan obteniendo resultados, buscarán trabajar con las autoridades locales para establecer una política zonal y permanente en materia medioambiental.
La recién formada Comisión Medioambiental de Coya y Machalí programó la primera visita al cerro El Minero para el próximo martes, a partir de las nueve de la mañana. Luego, el 14 de mayo, se dará inicio a la primera reunión de trabajo por la sustentabilidad de la región.
En el cerro El Minero es donde se pretende instalar esta planta de acopio a la que los vecinos y organizaciones ambientales de la sexta región le hicieron frente.
En marzo denunciaron que Codelco, dueña del proyecto, retrasó la difusión de antecedentes relevantes para evitar que la ciudadanía se organizara en contra de esta planta tóxica, la que según ellos contaminará cuencas y valles de la localidad.
Pero esta planta lo que haría es formalizar una situación que ha estado vigente, tal como indicó Carmen Denis, presidenta del Comité Ambiental de Machalí quien relató la forma en la que se conformó esta comisión que estudiará las implicancias para la salud y el desarrollo social del proyecto de la empresa estatal.
“En realidad el arsénico estuvo 17 años en el cerro El Minero, literalmente encima de la tierra, con bolsas de plástico, sin ningún tipo de resguardo, porque en esos años la ley lo permitía. Yo propuse crear un comité o un grupo para oponernos a este proyecto y que nos dijeran claramente de qué se trataba. Entonces, Codelco nos llamó a una mesa de trabajo y de diálogo”, explicó.
La dirigenta señaló que están recién en conversaciones, aunque reconoció que han visto muy buena disposición de Codelco para colaborar con el trabajo. Incluso, el gerente de sustentabilidad de la estatal, Flavio Angelini, comprometió un análisis permanente de las materias sobre polución que afectan a los vecinos.
Esto fue posible gracias a la mediación de los trabajadores mineros del sector. La Confederación de Trabajadores del Cobre (CTC) fue generando el diálogo con la gerencia y propiciando las condiciones.
De hecho, su director nacional, José Irarrázaval, afirmó que la instancia buscará proyectar una política permanente y crítica respecto de todos los proyectos nocivos para la ciudadanía.
“Esta comisión viene para quedarse, y en ese contexto vamos a ver todos los temas que estén relacionados con el medioambiente, no solamente con el arsénico, sino también con la emanación del ácido que sale de las chimeneas en Caletones y el tema de las aguas. Pero la coyuntura específica que nos movió a formar la comisión es el tema del arsénico”, aclaró.
El dirigente añadió que en la medida que se vayan obteniendo resultados, buscarán trabajar con las autoridades locales para establecer una política zonal y permanente en materia medioambiental.
La recién formada Comisión Medioambiental de Coya y Machalí programó la primera visita al cerro El Minero para el próximo martes, a partir de las nueve de la mañana. Luego, el 14 de mayo, se dará inicio a la primera reunión de trabajo por la sustentabilidad de la región.
En el cerro El Minero es donde se pretende instalar esta planta de acopio a la que los vecinos y organizaciones ambientales de la sexta región le hicieron frente.
En marzo denunciaron que Codelco, dueña del proyecto, retrasó la difusión de antecedentes relevantes para evitar que la ciudadanía se organizara en contra de esta planta tóxica, la que según ellos contaminará cuencas y valles de la localidad.
Pero esta planta lo que haría es formalizar una situación que ha estado vigente, tal como indicó Carmen Denis, presidenta del Comité Ambiental de Machalí quien relató la forma en la que se conformó esta comisión que estudiará las implicancias para la salud y el desarrollo social del proyecto de la empresa estatal.
“En realidad el arsénico estuvo 17 años en el cerro El Minero, literalmente encima de la tierra, con bolsas de plástico, sin ningún tipo de resguardo, porque en esos años la ley lo permitía. Yo propuse crear un comité o un grupo para oponernos a este proyecto y que nos dijeran claramente de qué se trataba. Entonces, Codelco nos llamó a una mesa de trabajo y de diálogo”, explicó.
La dirigenta señaló que están recién en conversaciones, aunque reconoció que han visto muy buena disposición de Codelco para colaborar con el trabajo. Incluso, el gerente de sustentabilidad de la estatal, Flavio Angelini, comprometió un análisis permanente de las materias sobre polución que afectan a los vecinos.
Esto fue posible gracias a la mediación de los trabajadores mineros del sector. La Confederación de Trabajadores del Cobre (CTC) fue generando el diálogo con la gerencia y propiciando las condiciones.
De hecho, su director nacional, José Irarrázaval, afirmó que la instancia buscará proyectar una política permanente y crítica respecto de todos los proyectos nocivos para la ciudadanía.
“Esta comisión viene para quedarse, y en ese contexto vamos a ver todos los temas que estén relacionados con el medioambiente, no solamente con el arsénico, sino también con la emanación del ácido que sale de las chimeneas en Caletones y el tema de las aguas. Pero la coyuntura específica que nos movió a formar la comisión es el tema del arsénico”, aclaró.
El dirigente añadió que en la medida que se vayan obteniendo resultados, buscarán trabajar con las autoridades locales para establecer una política zonal y permanente en materia medioambiental.
La recién formada Comisión Medioambiental de Coya y Machalí programó la primera visita al cerro El Minero para el próximo martes, a partir de las nueve de la mañana. Luego, el 14 de mayo, se dará inicio a la primera reunión de trabajo por la sustentabilidad de la región.
