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Bolivia inaugura campaña por retorno al mar luego de visita papal

Diversas postales dejó la visita del Papa Francisco a Sudamérica. A los miles de fieles que se congregaron en las misas oficiadas en Ecuador, Bolivia y Paraguay se sumaron sus discursos sobre la desigualdad en el continente, pero también las palabras que dedicó al capítulo pendiente entre Chile y Bolivia: el mar.

Paula Correa

  Lunes 13 de julio 2015 18:01 hrs. 
PapaEvo

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En el arribo a La Paz del Papa Francisco, el Presidente Morales lo recibió dándole la bienvenida a “un país despojado del mar”, a lo que el sacerdote argentino respondió con un llamado al diálogo. Más atención causaron sus declaraciones sobre la validez del planteamiento boliviano: “No es injusto” el objetivo de obtener una salida al mar, agregó.

La declaración completa se enmarcó en respuesta a la pregunta por los límites definidos entre ambos países hermanos: “Siempre hay una base de justicia cuando hay cambio de límites territoriales y sobre todo después de una guerra. Yo diría que no es injusto plantearse una cosa de ese tipo”, dijo el líder de la Iglesia católica.

Sin embargo, fue cauto. El religioso recordó que la aspiración boliviana está en manos de un tribunal internacional, por lo tanto, cualquier comentario de su parte, en su calidad de jefe de Estado, podría ser leída como una situación de presión: “Tengo que ser muy respetuoso de la decisión que tomó el pueblo boliviano que hizo ese recurso”, dijo.

En esa misma línea, el sumo pontífice señaló que hablar de una mediación es algo delicado, por ello lo situó “como el último paso” de esta negociación.

Desde Chile, el Ministro de Relaciones Exteriores Heraldo Muñoz sostuvo que respeta las palabras del Sumo Pontífice e insistió en la posición de Chile “porque se funda en el derecho”. Además, indicó que nuestro país está disponible para conversar y mejorar las condiciones de acceso al mar, pero sin ceder territorio soberano.

El académico del Instituto de Estudios Internacionales (IEI) de la Universidad de Chile, Gilberto Aranda, afirmó en conversación con nuestra emisora que, las palabras del Papa Francisco, a pesar de la cautela con la que se expresó, aun así expresan una postura política de parte de un Papa que es tan activo como lo fue Juan Pablo II.

“En este caso lo que hace el Papa Francisco es colocarse como un verdadero intermediario político, primero en el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba, y ahora como posible, probable intermediario político entre Bolivia y Chile”.

Aranda explicó que mediar es una figura jurídica, efectivamente compleja, pero que eso no lo excluye de estar disponible a facilitar el diálogo.

En tanto, desde Bolivia se informó que la campaña por difundir el punto de vista del país se extenderá hacia Brasil y Argentina. Así, será el propio Evo Morales quien transmitirá la información a sus pares: “Tengo que viajar a Argentina, tengo un compromiso con la compañera Cristina (Fernández), dos días de gestiones, estamos en una gran campaña para que Bolivia vuelva al mar con soberanía”.

Por su parte, el ministro de la Presidencia de Bolivia, Juan Ramón Quintana señaló que no han recibido notificación de parte de Chile para el restablecimiento de las relaciones diplomáticas: “No tenemos todavía ninguna invitación a restablecer la agenda de los 13 puntos con Chile; entendemos que la Cancillería chilena está respondiendo más a través de los medios de comunicación, no por vía diplomática; no tenemos hasta este momento nada”.

Con esto se puso fin a una extensa gira que comenzó el domingo 5 de julio y donde Francisco visitó Ecuador, Bolivia, Paraguay, países que tienen en común el estar sumamente desprotegidos ante los impactos del modelo político y económico sobre el ecosistema y el medioambiente.

En su recorrido además el Papa dio siempre señales a los más pobres y quienes ha llamado también “las víctimas de esta cultura del descarte”, tal como indicó también el analista internacional, Gilberto Aranda: “Un Papa que está intentando colocar la agenda de la postmodernidad, pero que no olvida que hay sociedades que aún viven en un mundo pre-moderno, donde los niveles de pobreza y pauperización son intolerables”.

Aranda afirmó que la sensibilidad de crítica al capitalismo descarnado que ha expresado el Papa en sus encíclicas y sus viajes lo ubica en una posición de diálogo, una interlocución “sin baches” respecto de otras manifestaciones políticas de origen no cristiano: movimientos sociales, indigenistas, ideologías de izquierda, movimientos populares.

“Este es el matiz novedoso”, afirmó el especialista y apuntó a la capacidad del Papa de tender puentes con nuevos actores.

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