Más de un cuestionamiento le ha llegado a Chile Vamos tras dar a conocer su elenco para el comité experto. Katherine Martorell y Hernán Larraín fueron objeto de reprobación para el académico de la UAI, Cristóbal Bellolio, quien afirmó que la derecha puso en riesgo el nuevo proceso constituyente al llevar a figuras con perfil más político que técnico a la instancia que “para blanquearse ante las críticas, tenía que ser más papista que el Papa”. En tanto, el profesor titular de la facultad de derecho de la UDP, Hugo Herrera, apuntó a una “corrupción orgánica de la derecha” en la medida que el bloque privilegió a funcionarios del “think tank” -como los rostros de Libertad y Desarrollo- en detrimento de la actividad intelectual.
Desatinos -a juicio de dos referentes del mundo liberal y de la centroderecha- que se enmarcan a un momento político complejo para la triada de UDI, RN y Evópoli, y es que pese a los daños autoinflingidos del Gobierno, la oposición no ha logrado capitalizar el descenso de la popularidad del mandatario. Reflejo de ello es el último sondeo DataInfluye que reveló que 44,5% de los encuestados no se siente representado por ningún conglomerado, mientras que un 18,7% se siente representado por Apruebo Dignidad, y un 10,6% por Chile Vamos.
Aquilatando el pie en que se encuentra la coalición, el analista político y académico de la Universidad Autónoma, Tomás Duval, consideró que el sector se ve envuelto en un problema profundo al no sintonizar con la ciudadanía por la falta de una propuesta política alternativa.
“Ser meramente oposición no rinde por sí solo. No por declararse opositor vas a hacer que las personas tengan mayor adhesión por ti, lo que interesa es saber cual es tu posición política en los temas y ahí es donde Chile Vamos ha carecido de propuestas políticas frente a la ciudadanía“, indicó, aduciendo que “es inentendible, por ejemplo, lo que sucede con seguridad” en cuanto Chile Vamos “crea un conflicto artificial en un tema que para la ciudadanía yo diría que es hipersensible”.
Pese a que el timonel de Renovación Nacional, Francisco Chahuán, advirtió al Gobierno que Chile Vamos llevaría el ritmo de la agenda legislativa en materia de seguridad a partir de marzo, el académico consideró difícil que la oposición marque pauta por estos temas. “Yo creo que los temas están puestos sobre la mesa, la seguridad, la pensión y reforma tributaria son temas que están encima y el Gobierno los ha impulsado”, indicó.
“Si el Gobierno coloca una agenda en los temas que estoy señalando me parece que ahí tiene la iniciativa política y no me parece que la oposición sea la que lleve los temas que va a impulsar, creo que no tiene la fuerza política tampoco, no lo tiene en la Cámara de Diputados, en el Senado sí porque hay una suerte de empate, por lo tanto es bien complejo decirlo. Yo creo que podría ser un actor importante en aprobar esas materias que señalé que son proyectos de largo aliento”, añadió.
Abordando la materia constituyente, Duval consideró un error las designaciones de militantes duros al comité experto. “Chile Vamos hizo una mezcla entre expertos y trayectoria política, son tres ministros del gobierno de Sebastián Piñera, por lo tanto ahí hay una mezcla muy compleja”, señaló.
Si bien el académico es de la idea que nadie cumplió con la categoría de expertos, relevó que “Chile Vamos podría haber tenido esa opción porque tenía más posibilidades de elegir pero tampoco lo hizo. Si hubiese escogido a expertos más vinculados al mundo académico habría dado una señal potente frente a la ciudadanía y yo creo que eso lo perdió, creo que ese es el error político que comete Chile Vamos”.
En ese sentido dijo esperar que los cuadros llevados por la oposición no caigan en una suerte de revanchismo con el adversario político. “Sería entrar de nuevo en una espiral que naturalmente puede llevar al fracaso”, indicó, avizorando “un error profundo que terminaría dañando al propio proceso constitucional en curso”.
En una segunda arista, Duval ve un “punto adecuado y profundo” en la crítica desarrollada por Herrera. “Es decir, la visión meramente economicista en medio de un proceso constitucional da la visión de no entender hacia dónde va caminando al país y por lo tanto, creo que ahí hay una crítica muy válida y profunda a la derecha, que si lo miras de ese ángulo, es poco lo que se puede hacer respecto del proceso constituyente. Muestra una debilidad evidente de Chile Vamos en esa materia”, sostuvo.
Y añadió que “si uno mira a la derecha han surgido intelectuales interesantes, el propio Herrera, Mansuy y otros más que también le dan un contenido político distinto y aportan una mirada hacia la política. Yo creo que ese es el punto más importante que la derecha no ha tomado en su real potencial y se ha quedado con estas manifestaciones ya tradicionales más bien de un área, como dice Hugo Herrera, de un think tank, que evidentemente tiene una mirada sesgada de la sociedad”.
Tesis del reemplazo
Otro flanco de Chile Vamos está en la propia disrupción del Partido Republicano y su pretensión de arrogarse la representatividad de la derecha. Al respecto Duval no sólo vio “un duelo de identidades” entre ambas fuerzas, sino además también dentro de la propia tríada de la UDI, RN y Evópoli.
“Más bien parece verse una disputa entre Chile Vamos y Republicanos, pero también hay diferencias que no se notan entre los partidos de Chile Vamos, es un tema que políticamente está tensionando a la oposición y que no está resuelta”, afirmó.
Apuntando al partido de José Antonio Kast, indicó que “estamos viendo una disputa por quién es la derecha y desde ese punto de vista Chile Vamos se encuentra bastante confundido y reacciona frente a las provocaciones de Kast. Pero el único ganador hasta el momento es el Partido Republicano y mientras los partidos de Chile Vamos no se decidan por una centroderecha o marquen una línea divisoria con Republicanos, le va a ser muy difícil”, sostuvo.
Bajo esa consideración, señaló que “Chile Vamos debiera primero establecer una barrera con Republicanos en muchas materias y no seguir esta lógica de la confrontación y al juego de identidades. Un poco lo mismo ocurrió hace un tiempo atrás con la propia izquierda, entonces si Chile Vamos sigue en el mismo juego va a terminar siendo irrelevante”.