En medio de una entrevista con El Mercurio, el expresidente Sebastián Piñera retrató al gobierno de Salvador Allende como uno que “no respetó los principios de la democracia”.
Las afirmaciones del mandatario se sumaron a otras que provocaron reacciones de parlamentarios del oficialismo. Entre ellas indicó que esa supuesta característica de la administración de la Unidad Popular fue planteada “por organismos de la época”.
Piñera agregó que a su juicio se debe “cuidar la democracia, de respetar los derechos humanos siempre, en todo lugar y circunstancia, la importancia de la sana convivencia cívica, la importancia del diálogo y los acuerdos, la importancia de no presentar proyectos totalitarios, excluyentes y mesiánicos”.
Sin embargo, en ninguna parte de la entrevista se refirió a los cuatro informes incluidos el de Naciones Unidas, Human Rights Watch y Amnistía Internacional que señalaron que durante el estallido social su administración cometió serios atropellos a los derechos humanos de cientos de personas.
Consultada por las palabras del exjefe de Estado, la presidenta del Partido Socialista -del cual Allende fue uno de sus fundadores-, Paulina Vodanovic, criticó la postura de Piñera.
“Es de un tono que no corresponde al de un expresidente, más bien sale a atacar, no tiene ese espíritu que esperaría yo de un expresidente, sobre todo cuando a él se le pregunta si quiere ser candidato en la última pregunta y él dice que no, que quiere ser un buen expresidente”.
A juicio de Vodanovic “de la lectura de toda la entrevista yo veo todo lo contrario. Veo que está en la coyuntura, que no está en un análisis con altura de miras y con los 50 años del golpe creo y me quedo con una frase que él señala que es que haya una valoración por la democracia por todos y del respeto a los derechos humanos por todas y todos”.
Mientras, el jefe de la bancada de diputados del Partido Comunista, Luis Cuello, sostuvo que “la Unidad Popular fue el gobierno más democrático que la historia de Chile tenga registro con participación de los trabajadores, sin sectores excluidos”.
A eso subrayó que “quienes violaron los principios democráticos son aquellos que promovieron la intervención norteamericana que está acreditada en el Informe Church y que también usaron a las Fuerzas Armadas para derrocar a un gobierno electo popularmente y posteriormente para violar los derechos humanos del pueblo chileno”.
El diputado y presidente de Acción Humanista, Tomás Hirsch, señaló por su parte que los dichos de Piñera son de una “profunda ignorancia” y dijo que “choca” que exprese que hubo un “lado luminoso” sobre la dictadura de Pinochet. “No hay luminosidad en una dictadura que violó sistemáticamente los derechos humanos”, precisó el parlamentario.
“Llama profundamente la atención la ignorancia o mala fe del expresidente Piñera. El Presidente Salvador Allende fue un demócrata toda la vida, cumplió con los más altos de respeto a la democracia, y fue el sector al que pertenece Sebastián Piñera quién le hizo un sangriento golpe de Estado”, sostuvo Hirsch.
En tanto, el presidente del Senado Juan Antonio Coloma, comentó que “si vamos a revisar los 50 años, revisémoslo con un sentido de tratar de aprovechar las lecciones comunes más que sentirse acreedores unos de otros”.
En ese sentido indicó que es importante “reflexionar a fondo en lo grave que es debilitar la democracia, no tener un espíritu de respeto cívico, lo importante que es la defensa de los derechos humanos”.
Coloma cerró apuntando que “creo que hay muchos elementos que nos pueden unir a partir de las experiencias traumáticas que se vivieron hace más de 50 años. Porque la verdad hace 50 años es una fecha que uno puede fijarla en el calendario. Pero que el deterioro de la democracia venía hace mucho en Chile, es evidente que así era”.