Fue en un total de 338 comunas del país que, en un resultado contundente, se posicionó el Rechazo al proyecto de nueva constitución en el histórico plebiscito que tuvo lugar ayer domingo.
De hecho, sorpresa causó el triunfo de esta alternativa en comunas donde en el plebiscito de entrada de octubre de 2020 se inclinaron mayoritariamente por aprobar la redacción de una nueva Carta Fundamental.
Una de ellas fue San Ramón. Hace dos años en dicho territorio el Apruebo obtuvo un 86,75% de los votos; sin embargo, en esta elección el Rechazo alcanzó el 52,19% de las preferencias.
En entrevista con Radio Universidad de Chile, el alcalde Gustavo Toro abordó este escenario y dijo que, si bien valora la amplia participación ciudadana que tuvo el evento plebiscitario en San Ramón, con aproximadamente 65 mil personas, le sorprendió el resultado. Esto, especialmente por tratarse de una comuna en la que “hay una clara determinación hacia la centroizquierda”.
De todos modos, recalcó que el Rechazo “no es propio de un sector político de derecha, representa también un descontento hacia el texto propiamente tal, en mucha inseguridad para varios vecinos, que nos plantearon cuando estábamos recorriendo las calles la última semana. Tenían temor sobre todo a las transformaciones profundas que se estaban plasmando en el texto constitucional”.
“Hay personas a las que de verdad les ha costado mucho sacrificio y esfuerzo construirse en la vida y que ante el riesgo de poder perder o que se les cuestione lo poco que tienen, prefieren no hipotecarlo”, expresó el jefe comunal DC que respaldó a la opción del Apruebo.
Por ello consideró que “la señal que tenemos que recoger es que debemos escuchar más a los vecinos, debemos estar más atentos a las necesidades y no encerrarse en un concepto político sobre todo de arrogancia. Probablemente, lo que nos deja el día de ayer es que debemos trabajar en unidad y con humildad”.
En esa línea, acusó que algunos actores por el Apruebo “se daban por ganadores con una ideología que no está conectada con la ciudadanía, con una ideología que pareciera que vienen a transformar todo y que todo lo que existió estaba malo. Pero es un sector que yo diría que son más fundamentalistas principalmente en el discurso”, extrapolando esta actitud también a la Convención Constitucional.
Para Toro al órgano redactor “le faltó conexión con los vecinos, con los pobladores, con el mundo social que se escuchó poco en cuanto a las necesidades reales. Se hicieron algunos esfuerzos, pero creo que en definitiva las decisiones que se tomaron fueron muy desconectadas de lo que los vecinos realmente quieren, que quieren un país donde prime la seguridad, la salud, donde exista realmente un buen vivir y a ratos sintieron que un nuevo texto no garantizaba el anhelo de país que ellos quieren para sus hijos y sus nietos”.
“Llegó un momento en que la ciudadanía, en este caso los vecinos de San Ramón, no se sintieron representados por los constituyentes en su mayoría, que se dieron cuenta de que eran personas que estaban en la misma ideología política que a ellos los tenían decepcionados”, aseveró.
En cuanto a la postura con que el Gobierno debiese afrontar esta derrota, el alcalde Gustavo Toro consideró que la administración del presidente Gabriel Boric “debe tener la capacidad de reinventarse, de volverse a conectar con la ciudadanía, de buscar acuerdos políticos y entender que no siempre se tiene la razón, que hay que poner a las personas más indicadas a ser voceros, transformadores, conectores con el mundo político que nos permitan tener confianza, que permitan recoger lo mejor de la ciudadanía y sobre todo poner en urgencia aquellos temas que los vecinos necesitan y no aquellos que muchas veces se piensan y que están totalmente desconectados de la realidad”.
Estos dichos de la autoridad comunal cobran relevancia, toda vez que en el Ejecutivo se aproxima un cambio de gabinete, en el que se perfila la salida del ministro Giorgio Jackson de la Secretaría General de la Presidencia, debido a las deterioradas relaciones que mantiene con el Congreso Nacional.
Por otra parte, Toro destacó la voluntad del mundo político de avanzar en una nueva constitución, aunque planteó que “este nuevo texto tiene que ser representativo, no puede estar encasillado en las personas que gobiernan o que dirigen los partidos políticos y debe ser a corto plazo”. “No podemos seguir dilatando y tampoco condicionando a otros fenómenos políticos como, por ejemplo, una próxima elección municipal o parlamentaria que, de alguna u otra manera, también condiciona el resultado. Este tiene que ser proceso rápido, independiente y que garantice el nuevo texto la representatividad de la ciudadanía”, añadió.