A solo diez días de la votación de consejeros constitucionales, el interés de la población por el proceso constituyente es escaso. Lo anterior ha sido advertido tanto por el oficialismo como la oposición, donde señalaron que “no hay ambiente electoral”.

Para abordar este tema, Radio y Diario Universidad de Chile conversó con figuras del mundo político y académico, entre ellas, el diputado del Partido Socialista, Leonardo Soto, quien aseguró que la falta de motivación de los ciudadanos tiene que ver, por ejemplo, con un reordenamiento en las prioridades.

“Los graves problemas de inseguridad y de brotes de crimen organizado han generado mucha intranquilidad y miedo en la población. Eso, a su vez, ha ido estableciendo urgencias inmediatas y directas en torno al tema de seguridad, que se distancian enormemente de la prioridad constitucional”, expresó.

De todas maneras, Soto dijo tener esperanzas en que los chilenos y chilenas se informen a tiempo para votar y que, eventualmente, demuestren la cultura cívica “que nos tiene como pueblo en un nivel muy superior a los vecinos de América Latina”.

“En el caso contrario, como ocurre en cualquier proceso electoral, la desconfianza o desafección de los chilenos y chilenas va a debilitar nuestra democracia, va a reducir los niveles de soluciones que se puedan presentar para los grandes problemas y desafíos ciudadanos y en definitiva podrían, incluso, acarrear un rechazo en la votación del plebiscito de salida. Eso sería muy lamentable, porque nos obligaría a mantener las cosas tal cómo están”, indicó.

También se mostró relativamente optimista con el futuro de los comicios la presidenta de la Federación Regionalista Verde Social (FRVS), Flavia Torrealba. Pese a que en un inicio su colectividad instó a postergar este proceso constituyente, actualmente la colectividad está desplegando todos sus esfuerzos para que las personas participen de las elecciones.

“Nosotros creo que fuimos el partido que más intensamente advirtió que era muy complejo reiniciar este proceso constituyente después de haber perdido el momento de mayor vínculo de la ciudadanía, con esta necesidad de escribir una regla madre (…) Sin embargo, no logramos convencer a nuestros aliados de que era necesario esperar otro momento, perdimos esa discusión política y evidentemente, como todo demócrata que se precie, tenemos que seguir en el proceso igual”, dijo.

Según Torrealba, en estos momentos la FRVS “está haciendo un esfuerzo desesperado por convocar a la ciudadanía, porque tampoco es bueno que la gente ceda sus derechos políticos y terminen siendo unos pocos los que dicten las normas supremas de una nación”.

Asimismo, consideró que “una altísima abstención o un buen resultado para los que están llamando a anular el voto, no va a detener el proceso porque, aunque decidan 20 personas, el proceso va a seguir igual, pero con un grave problema de legitimidad”.

Desde el mundo académico, la cientista política y profesora de la Facultad de Gobierno de la Universidad de Chile, Isabel Castillo, estimó que si no se logra entusiasmar a los votantes, podría haber un triunfo electoral de las fuerzas políticas “que se han manifestado en contra del proceso, como el Partido de la Gente o el Partido Republicano”.

“El Partido de la Gente, por ejemplo, apela a esta idea de que no somos ni de derecha ni de izquierda, que nosotros buscamos representar las demandas de la clase media y ese es un discurso que cala hondo en las personas que en general están menos politizadas y que ven que los partidos tradicionales no han logrado resolver las demandas ciudadanas”, explicó.

En tanto, la exsecretaria general de Evópoli, Francesa Parodi, consultada por esta apatía en el proceso constituyente, cuestionó la falta de acción del Gobierno y el lanzamiento de la campaña comunicacional a pocos días del evento electoral.

En esa línea, apuntó que “el Gobierno fue muy participativo en el proceso anterior y muy poco participativo en el proceso actual. El Gobierno debería hacer todo lo que pueda para desplegarse y creo que hay una campaña informativa ahora, pero estamos hablando ya de dos semanas, donde lamentablemente los tiempos se acotan bastante”.

En todo caso, Parodi consideró que el bajo interés de la ciudadanía no es el único punto que debería ser fuente de preocupaciones.

“Es muy relevante no solamente que haya una amplia participación, sino que también el proceso sea lo más quitado de bulla que podemos tener y no con esos estruendos que tuvimos en el proceso pasado. La ciudadanía debería interesarse en el proceso más allá de si uno se está duchando o que si otro mintió con el cáncer, que sea más centrado en el fondo, que en las personas que pueden entrar eventualmente a la Convención”, afirmó.