La compleja situación económica en la que se encontrarían las Isapres ha generado preocupación en el debate público. La semana pasada, la Corte Suprema se negó a extender el plazo de aplicación del fallo GES (que les impide subir el precio de dicha prima) y según las propias aseguradoras esto pondría “en cuenta regresiva” al sistema.

En conversación con Radio y Diario Universidad de Chile la exministra de Salud durante el gobierno de Michelle Bachelet, María Soledad Barría, aseguró que los mismos pronósticos se hicieron hace un año atrás con el fallo de la Corte Suprema sobre la tabla única de factores. “Hay un cierto chantaje de parte de las Isapres y de los voceros que están hablando de parte de ellas”, aseguró.

“Exsuperintendentes que son directores de Isapres han señalado que viene un colapso total, que va a morir gente, que van a ver 600 mil personas sin acceso a salud, pero yo creo que hay que ser cuidadosos”, agregó Barría.

En ese contexto, la exministra recordó que actualmente existe un mecanismo para actuar en caso de que se produzca la quiebra de una aseguradora. Según la académica, la institución que se hace cargo en esa eventualidad es la Superintendencia de Salud, quien ofrece, en primer término, la cartera de usuarios de la Isapres a otra que sí tenga la capacidad de atenderlos. Luego, si esto no ocurre, los beneficiarios pasan a FONASA.

“Hay todo un procedimiento legal, esto ha sucedido antes, han quebrado Isapres y nadie ha quedado ni se ha muerto en el camino. Entonces, yo llamaría a la tranquilidad, a la comprensión de que son las personas las importantes y que las Isapres tienen que empezar a cumplir la legislación. La ley es pareja para todos y si ellos han cobrado demás tienen que devolver lo que han estado cobrando demás”, planteó.

Asimismo, Barría acusó que las Isapres “ya tienen utilidades” y “que están mejor paradas de lo que dicen estar”. “El año pasado no las tenían porque venían saliendo de la pandemia, pero este año ya están teniendo”, afirmó.

“Yo no quito la gravedad de esta situación, pero es una gravedad que ellas han estado cobrando demás y no puede ser que estén por sobre la ley”, insistió.

Por otra parte, consultada respecto a las medidas que ha tomado el Gobierno frente a la crisis de las Isapres, la exministra negó que exista un deseo por dejarlas quebrar y estatizar, a la fuerza, el sistema de salud.

“Es bien curiosa esa afirmación cuando hace seis meses, más incluso, se puso la Ley Corta de Isapres en el Congreso y todavía no sale del Senado. En esa ley corta, se extiende el plazo para que las Isapres paguen a diez años. Entonces, esto no es una amenaza del Gobierno, aquí se ha propuesto una salida, una salida que hace que cumplan el fallo, se les da tiempo para cumplirlo y eso tiene que ser aprobado por el parlamento”, indicó.

Por último, la exministra se refirió a quienes incluso han pronosticado la muerte de miles de usuarios, producto del traspaso desde las Isapres a FONASA.

“Yo le puedo decir a esas personas que hoy día hay 16 millones 200 mil chilenos y chilenas que están en FONASA. Hoy el 82% de la población está en FONASA, entonces, ¿de qué estamos hablando con ese miedo? Probablemente, la gente que se traspase de las Isapres a FONASA va a tener una condición económica, social, que va a poder atenderse en sus propios prestadores privados mediante la libre elección que es un sistema distinto a los consultorios u hospitales, así que no tiene que asustarse por aquello, sino que van a estar en la misma condición que el 82% de los chilenos y chilenas”, concluyó.