El dólar continuó con su caída libre alcanzando un nuevo mínimo en casi 16 meses. Durante la jornada del lunes la divisa terminó  por debajo de la barrera sicológica de los 500 pesos, en medio del alza del precio del cobre y un desarme en las operaciones de "carry trade", en las cuales los inversionistas se endeudan en monedas de bajos retornos para invertir en activos con altos rendimientos.

De esta manera, el billete verde bajó 5,2 pesos, quedando en 496,5 comprador y 496,9 vendedor en el mercado chileno. De este modo, la moneda local se fortaleció un 29,16 por ciento frente a la estadounidense durante 2009, lo que contrasta con la depreciación de un 22,3 por ciento que registró al término de 2008.

En el mercado local se ha especulado sobre la posibilidad de que el Ministerio de Hacienda o el Banco Central puedan intervenir para restar fuerza al peso, si continúa con el sostenido avance que ha registrado en las últimas semanas.

El titular de las finanzas públicas, Andrés Velasco, llamó a la cautela, pero no quiso adelantar medidas extraordinarias para enfrentar la caída del dólar.

“El gobierno siempre sigue muy de cerca el dólar y por eso es que la semana pasada tomamos medidas en el curso del trámite del presupuesto, duplicamos el límite del endeudamiento para el año 2010, de modo que la administración entrante tenga alternativas, pueda evitar liquidar dólar si así lo desea, colocando bonos en peso en el mercado nacional”, precisó el secretario de Estado.

Uno de los grupos más afectados por la volatilidad del tipo de cambio es el sector exportador, debido al menor regreso de divisas desde el exterior. En conversación con nuestra emisora, el presidente de la Asociación de Exportadores de Manufacturas, Eduardo Moyano, señaló que esta situación no sólo afecta a las empresas del rubro, sino también a otras áreas de la economía.

“La autoridad no puede quedar impávida frente a esta situación porque el problema es grave. No sólo tiene que ver con los exportadores sino que hay una cantidad importante de actividades nacionales que son sustitutas de importaciones, vale decir, si alguien produce calzado tiene como competidor a alguien que confeccione ese mismo producto en otras partes del mundo y si aquí el tipo de cambio es muy bajo, será una competencia desleal y eso no es bueno pq estamos recién empezando a respirar después de una crisis”, explicó Moyano.

Por su parte, el economista de Aserta, Hernán Frigolet, aseguró que se encuentran las condiciones dadas para una intervención cambiaria del Banco Central.

“Lo más directo es intervenir. El Banco Central ya tiene una experiencia en la que el dólar declinó fuertemente y se apreció el precio en magnitudes relativamente importantes, que fue en el episodio de marzo y abril del 2008. Ahí se diseñó un programa de compra de reserva para incrementar las reservas internacionales que quedó truncado por la crisis. Faltaron tres meses de compra y tal vez este sería el momento de reactivar el proceso y completar esta estrategia de fortalecimiento”, afirmó el experto.

Además de la baja del dólar, el incremento de la moneda es empujada por un alza en el precio del cobre en Londres ante la debilidad del dólar, el mal tiempo en China y una mejoría en los datos del crecimiento económico de Japón.

Las operaciones electrónicas en el mercado cambiario local bajaron a US$800 millones, desde los US$942 millones negociados en la jornada anterior.