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Honduras a las urnas

Con un presidente constitucional depuesto, denuncias de violaciones a los Derechos Humanos, un régimen de facto  que se impuso ante el rechazo internacional y un país absolutamente fracturado, Honduras se prepara para vivir unas elecciones que para muchos son ilegítimas.

Ingrid Saavedra T

  Viernes 27 de noviembre 2009 20:10 hrs. 
Radio-Uchile

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Con un presidente constitucional depuesto, denuncias de violaciones a los Derechos Humanos, un régimen de facto  que se impuso ante el rechazo internacional y un país absolutamente fracturado, Honduras se prepara para vivir unas elecciones que para muchos son ilegítimas.

Finalmente, este domingo 29 se llevarán a cabo las elecciones en Honduras, un proceso ampliamente cuestionado por la comunidad internacional, que considera que no hay garantías democráticas para su realización.

Los invitados a cumplir como observadores en las polémicas elecciones comenzaron a llegar este viernes y se espera que más de trescientas  personas supervisen los comicios.

Este jueves, la Corte Suprema de Justicia hondureña determinó que el depuesto Presidente, Manuel Zelaya, no debe ser restituido en el poder mientras tenga órdenes de captura en su contra.

Dicha opinión fue entregada al Congreso para que ese organismo la considere en la votación del 2 de diciembre, en la que decidirán si Zelaya puede o no volver al cargo del que fue depuesto por el golpe de Estado del 28 de junio pasado.

Mientras, el gobierno de Barack Obama decidió abandonar al presidente constitucional y apostar a la legitimidad de las elecciones en Honduras realizadas bajo el gobierno golpista, rompiendo así con el consenso de la mayoría de los países de América Latina, incluso con aliados como Brasil.

Inicialmente, Obama había declarado “ilegal” el “golpe de Estado”, y junto con la Organización de Estados Americanos rechazó, entre titubeos y señales contradictorias, la legitimidad del gobierno de facto y exigió la restitución del gobierno constitucional. Sin embargo, su posición cambió y este miércoles reiteró la nueva postura estadounidense en una carta enviada al presidente de Brasil, Luis Inacio Lula da Silva, en la cual justificó el apoyo estadounidense a la elección en Honduras, ya que con eso la situación después de los comicios “partiría de cero”, según filtró un funcionario brasileño. El presidente brasileño respondió la carta con una clara señal de su postura: “Mi posición es inamovible: no reconozco la legalidad de esos comicios”.

En tanto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos expresó este jueves su "más alta preocupación" por la libertad de expresión en Honduras en vísperas de las elecciones, luego de los incidentes sufridos por dos emisoras televisivas opositoras.

Los candidatos

Cinco son los candidatos que aspiran a la presidencia de Honduras; los dos más destacados son Porfirio Lobo, del Partido Nacional (todas las encuestas le dan como gran favorito), y Elvin Santos, del oficialista Partido Liberal. Casi de manera testimonial, César Ham, de Unificación Democrática; Felícito Ávila, de la Democracia Cristiana y Bernard Martínez, del Partido de Innovación y Unidad, también postulan a la jefatura del Estado. Candidatos de todos los partidos se disputan 128 escaños del Congreso unicameral y más de 250 alcaldías.

El líder sindicalista Carlos Reyes, primer independiente que se presentaba en la historia de Honduras, se retiró de los comicios por no haberse restituido a Zelaya en la presidencia.

Los expertos señalan que una de las claves de estas elecciones será la abstención, que en los comicios de 2005, en los que se impuso Zelaya, llegó al 45 por ciento. Si se supera ese porcentaje, Zelaya podrá atribuirlo a su prédica en favor de desconocer estos comicios, impulsada desde el Frente a la Resistencia. Si aumenta la votación supondrá un apoyo a Roberto Micheletti.

La campaña electoral terminó en un clima de tranquilidad, que fue roto con el estallido de dos granadas, una colocada en la Corte Suprema de Justicia y la otra frente al edificio de un popular canal de televisión.

Al cierre del proceso, Zelaya envío una carta a la Organización de Estados Americanos (OEA), en la cual reclama por la “ambigüedad” y “contradicción” de los Estados Unidos ante el proceso.

Así las cosas, las cartas están echadas y sólo resta esperar el desarrollo del proceso. Otra de las incógnitas que quedan en el aire, es resolver quien será el que entregue el mando el próximo 27 de enero, si el presidente constitucional, o el mandatario de facto. La cuestión quedará resuelta el próximo 2 de diciembre, tres días después de las polémicas elecciones.

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