El próximo 15 de diciembre será un día clave. En esa fecha se espera que el ministro de Hacienda Andrés Velasco visite Paris, sede de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), para sellar formalmente el ingreso de Chile como miembro pleno del organismo internacional, más conocido como el “club de los países desarrollados”.
Así lo confirmó la Presidenta Michelle Bachelet, luego de reunirse con el secretario general de la OCDE, José Ángel Gurría, en el marco de la visita de Estado a Portugal.
La jefa de gobierno subrayó que esta es "una muy buena noticia" porque implica el ingreso a una entidad preocupada de la excelencia de las políticas públicas de sus integrantes.
“En diciembre nuestro ministro de Hacienda participará en la última reunión con la OCDE, en la que seremos aceptados como miembros plenos de esta organización y en enero sería en Chile la ceremonia final”, dijo la mandataria.
En la misma línea, el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, explicó los beneficios de formar parte del organismo que reúne a las treinta economías más desarrolladas del planeta y precisó que “ser miembro de la OCDE ser reconocido dentro del grupo de países que hacen las cosas bien, de modo democrático y con las mejores prácticas. Pero además da la posibilidad de estar sentado a la mesa cuando se escriben las reglas de la economía mundial”.
A su vez, el presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Rafael Guilisasti, confía que este paso traiga mejoras en la administración general de Chile.
“Vamos a tener una constante supervisión, evaluación y comparación con países que alcanzaron el desarrollo gracias a la calidad de sus políticas públicas. A raíz de la postcrisis cuando se abrió la interrogante sobre más mercado o más Estado, este ingreso significa buenas prácticas que articulen ambos elementos. Pero también creo que siendo parte de esto el riesgo de país es lo más bajo posible”, indicó Guilisasti.
Una visión más crítica respecto de las implicancias que tendrá la incorporación de Chile a la OCDE expresó Álvaro Ramis, presidente de la Asociación Chilena de Organismos No Gubernamentales, quien señaló que este proceso limitará la discusión democrática de las políticas públicas nacionales.
“Con este ingreso estamos obligados a ser medidos por estándares internacionales que normalmente no hemos discutido, entonces un peligro sería que sin deliberación ciudadana se comience a decidir una serie de patrones a nivel comercial y de régimen económico e institucional que se impongan desde fuera, lo que restaría la legitimidad democrática de esos procesos”, señaló Ramis.
Unos de los principales cambios realizados este año para acceder al organismo fueron la promulgación de la ley de secreto bancario y la reforma a los gobiernos corporativos tanto en el sector público como privado, siendo un claro ejemplo lo sucedido con Codelco.
El objetivo de la OCDE es coordinar las políticas económicas y sociales de los países que están dentro de sus filas a las que acceden sólo las naciones más avanzadas y desarrolladas del mundo.
El próximo 15 de diciembre será un día clave. En esa fecha se espera que el ministro de Hacienda Andrés Velasco visite Paris, sede de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), para sellar formalmente el ingreso de Chile como miembro pleno del organismo internacional, más conocido como el “club de los países desarrollados”.
Así lo confirmó la Presidenta Michelle Bachelet, luego de reunirse con el secretario general de la OCDE, José Ángel Gurría, en el marco de la visita de Estado a Portugal.
La jefa de gobierno subrayó que esta es "una muy buena noticia" porque implica el ingreso a una entidad preocupada de la excelencia de las políticas públicas de sus integrantes.
“En diciembre nuestro ministro de Hacienda participará en la última reunión con la OCDE, en la que seremos aceptados como miembros plenos de esta organización y en enero sería en Chile la ceremonia final”, dijo la mandataria.
En la misma línea, el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, explicó los beneficios de formar parte del organismo que reúne a las treinta economías más desarrolladas del planeta y precisó que “ser miembro de la OCDE ser reconocido dentro del grupo de países que hacen las cosas bien, de modo democrático y con las mejores prácticas. Pero además da la posibilidad de estar sentado a la mesa cuando se escriben las reglas de la economía mundial”.
A su vez, el presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Rafael Guilisasti, confía que este paso traiga mejoras en la administración general de Chile.
“Vamos a tener una constante supervisión, evaluación y comparación con países que alcanzaron el desarrollo gracias a la calidad de sus políticas públicas. A raíz de la postcrisis cuando se abrió la interrogante sobre más mercado o más Estado, este ingreso significa buenas prácticas que articulen ambos elementos. Pero también creo que siendo parte de esto el riesgo de país es lo más bajo posible”, indicó Guilisasti.
Una visión más crítica respecto de las implicancias que tendrá la incorporación de Chile a la OCDE expresó Álvaro Ramis, presidente de la Asociación Chilena de Organismos No Gubernamentales, quien señaló que este proceso limitará la discusión democrática de las políticas públicas nacionales.
“Con este ingreso estamos obligados a ser medidos por estándares internacionales que normalmente no hemos discutido, entonces un peligro sería que sin deliberación ciudadana se comience a decidir una serie de patrones a nivel comercial y de régimen económico e institucional que se impongan desde fuera, lo que restaría la legitimidad democrática de esos procesos”, señaló Ramis.
Unos de los principales cambios realizados este año para acceder al organismo fueron la promulgación de la ley de secreto bancario y la reforma a los gobiernos corporativos tanto en el sector público como privado, siendo un claro ejemplo lo sucedido con Codelco.
El objetivo de la OCDE es coordinar las políticas económicas y sociales de los países que están dentro de sus filas a las que acceden sólo las naciones más avanzadas y desarrolladas del mundo.
El próximo 15 de diciembre será un día clave. En esa fecha se espera que el ministro de Hacienda Andrés Velasco visite Paris, sede de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), para sellar formalmente el ingreso de Chile como miembro pleno del organismo internacional, más conocido como el “club de los países desarrollados”.
Así lo confirmó la Presidenta Michelle Bachelet, luego de reunirse con el secretario general de la OCDE, José Ángel Gurría, en el marco de la visita de Estado a Portugal.
La jefa de gobierno subrayó que esta es "una muy buena noticia" porque implica el ingreso a una entidad preocupada de la excelencia de las políticas públicas de sus integrantes.
“En diciembre nuestro ministro de Hacienda participará en la última reunión con la OCDE, en la que seremos aceptados como miembros plenos de esta organización y en enero sería en Chile la ceremonia final”, dijo la mandataria.
En la misma línea, el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, explicó los beneficios de formar parte del organismo que reúne a las treinta economías más desarrolladas del planeta y precisó que “ser miembro de la OCDE ser reconocido dentro del grupo de países que hacen las cosas bien, de modo democrático y con las mejores prácticas. Pero además da la posibilidad de estar sentado a la mesa cuando se escriben las reglas de la economía mundial”.
A su vez, el presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Rafael Guilisasti, confía que este paso traiga mejoras en la administración general de Chile.
“Vamos a tener una constante supervisión, evaluación y comparación con países que alcanzaron el desarrollo gracias a la calidad de sus políticas públicas. A raíz de la postcrisis cuando se abrió la interrogante sobre más mercado o más Estado, este ingreso significa buenas prácticas que articulen ambos elementos. Pero también creo que siendo parte de esto el riesgo de país es lo más bajo posible”, indicó Guilisasti.
Una visión más crítica respecto de las implicancias que tendrá la incorporación de Chile a la OCDE expresó Álvaro Ramis, presidente de la Asociación Chilena de Organismos No Gubernamentales, quien señaló que este proceso limitará la discusión democrática de las políticas públicas nacionales.
“Con este ingreso estamos obligados a ser medidos por estándares internacionales que normalmente no hemos discutido, entonces un peligro sería que sin deliberación ciudadana se comience a decidir una serie de patrones a nivel comercial y de régimen económico e institucional que se impongan desde fuera, lo que restaría la legitimidad democrática de esos procesos”, señaló Ramis.
Unos de los principales cambios realizados este año para acceder al organismo fueron la promulgación de la ley de secreto bancario y la reforma a los gobiernos corporativos tanto en el sector público como privado, siendo un claro ejemplo lo sucedido con Codelco.
El objetivo de la OCDE es coordinar las políticas económicas y sociales de los países que están dentro de sus filas a las que acceden sólo las naciones más avanzadas y desarrolladas del mundo.
