A cinco meses del paro que mantuvieron los funcionarios de Gendarmería en los diferentes penales del país, los dirigentes volvieron a manifestar su descontento, esta vez por la lentitud que ha tenido la tramitación en el Congreso del proyecto que moderniza Gendarmería, el que implica una serie de mejoras a sus condiciones laborales, por lo que no descartaron adoptar nuevas medidas de presión.  

El presidente de Asociación Nacional de Suboficiales de Gendarmería, Juan Alarcón, explicó que el proyecto -enviado por el gobierno con urgencia simple- se encuentra estancado en el Senado, aún sin ingresar a ninguna comisión, luego de ser aprobado por la Cámara en noviembre.  

La situación les preocupa ya que el Congreso funciona sólo hasta enero y temen que el proyecto no se alcance a aprobar durante la actual administración.

"El proyecto debería haber sido una realidad en noviembre, pero no ocurrió y no hay ninguna señal potente de que se va a aprobar", señaló el dirigente.