El ministro de Obras Públicas, Hernán de Solminihac, firmó un decreto que declara como zona de escasez hídrica a las cuencas de los ríos Petorca, Ligua y Aconcagua, junto a la comuna de Quilpué, en la región de Valparaíso; y a las cuencas de los ríos Cogotí y Huatulame, más las comunas de Canela y Los Vilos, en la región de Coquimbo.

Según los parámetros establecidos en la resolución 39 del año 1984, de dicho organismo, esta declaración corresponde si se verifica en un río un caudal igual o menor al 70 por ciento  de su promedio estadístico.

Esta medida, que durará seis meses no prorrogables, se toma para prevenir y anticiparse a potenciales conflictos que deriven de una agudización de la insuficiencia de agua en dichas cuencas.

Específicamente, la Dirección de Aguas (DGA) podrá hacerse cargo de la distribución del recurso hídrico en las zonas declaradas de escasez que contengan cauces naturales o artificiales sin organizaciones de usuarios.

También la DGA podrá autorizar extracciones de aguas superficiales o subterráneas desde cualquier punto, sin necesidad de constituir derechos de aprovechamiento de aguas y sin la limitación del caudal ecológico mínimo, junto con aumentar su fiscalización.

El director regional de aguas de Valparaíso, Francisco Hargous, señaló que en términos de caudal la situación es similar a la sequía de 1996 y aseguró que la medida se tomó a tiempo, al menos dos meses antes que en años anteriores.

Hargous reconoció que se trata de medidas de parche pero recalcó que “en el caso de La Ligua y Petorca hay un beneficio directo a los regantes. En Aconcagua también van a haber regalías porque, en el fondo, se va a distribuir agua a los canales y si los agricultores se surten de agua de ellos van a acceder al recurso también”.

El director de la DGA de Valparaíso añadió que el ministerio de Agricultura ofrece además fondos y otras herramientas para ayudar a los agricultores más afectados.

Por su parte, el académico de la Universidad de Chile, Fernando Santibañez, explicó que efectivamente este año ha habido un déficit importante y que afecta a todos los habitantes de dichas zonas.

“La situación de Coquimbo y de la región de Valparaíso ha sido bastante aguda porque hay un déficit de precipitaciones muy marcado asociado, probablemente, al fenómeno de La Niña, que se ha venido instalando desde hace ya varios meses. Esto implica una muy baja reserva de nieve en la cordillera, lo que nos hace prever un descenso marcado de la disponibilidad de agua y, por lo tanto, es muy probable que este año la agricultura sufra impactos importantes en materia de disponibilidad de riego y los otros usos”, precisó el experto.

El investigador de la Facultad de Ciencias Agronómicas advirtió, sin embargo, que siendo una emergencia es una situación que se va haciendo crónica pues las precipitaciones en el norte son decrecientes y podrían disminuir en un 15 por ciento más las próximas décadas, por lo que se requiere una política a largo plazo.

Similar opinión manifiesta la diputada PPD Adriana Muñoz, quien había solicitado decretar zona de emergencia en la región de Coquimbo por la sequía, y por ello aseguró que es una medida que se podría haber tomado mucho antes.
Si bien valoró la decisión gubernamental, la parlamentaria recalcó que la situación está afectando mucho a los pequeños agricultores y que, por lo tanto, se necesita un fondo permanente.

“Les he dicho a los ministros del Interior y de Agricultura que estas medidas son de parche. Desgraciadamente ya se han transformado en permanentes y por eso es que planteamos la creación de un fondo de emergencia para ir en ayuda de estos sectores cuando hayan situaciones catastróficas. Aquí hay que tomar decisiones de largo plazo y definir recursos en las regiones para realizar estudios hidrológicos para saber en qué sectores hay o se ha agotado el agua”, afirmó la parlamentaria.

Adriana Muñoz criticó que la agricultura represente sólo un 1,3 por ciento en el Presupuesto del próximo año, lo que va en desmedro de la inversión que se necesita en las zonas secas para potenciar a la pequeña industria agrícola.

Además de la declaración de escasez hídrica el Presidente Sebastián Piñera determinó la creación de una comisión asesora presidencial para la sequía integrada por los ministros del Interior, Obras Públicas y Agricultura y que será presidida por el subsecretario del Interior Rodrigo Ubilla.