Con un fuerte cuestionamiento por parte de los pueblos indígenas se
integra a su cartera el nuevo ministro de Planificación, Joaquín Lavín,
quien viene dejando un agitadísimo ministerio, envuelto en movilizaciones
y un intento de diálogo que no dio mayores frutos.
En este sentido, los dirigentes de diversas comunidades pusieron en
duda los avances que se podrán obtener con Lavín a la cabeza, cuando el
gobierno está intentando desarrollar una Gran Consulta Indígena, que
también ha sido criticada.
El werkén de la histórica comunidad Juan Paillalef, Antonio Cadín, puso
en duda también las competencias del nuevo ministro en un tema altamente
complejo que involucra dos siglos de desconfianza entre el Estado chileno
y los pueblos originarios.
“Yo no sé si tendrá tanto conocimiento como para poder abordar un tema
tan importante como el de los pueblos indígenas. Si va actuar como Kast,
que nunca estuvo a la altura, no van a haber avances porque incluso se
retrocedió en la entrega de tierras. Yo no creo que cambie mucho con el
ministro Lavín”, dijo Cadín.
Mientras, el vocero de la Comunidad Pepiukelen de Pargua, Francisco Vera
Millaquén, fue más tajante al señalar que una vez que el ministro fracasó
en Educación, lo envían a tomar el mando de las políticas indígenas en
Chile.
Para Aucán Huilcamán, vocero del Consejo de Todas las Tierras, esto queda
claro simplemente con observar las prioridades que el Presidente Piñera
trazó a sus nuevos secretarios de Estado, donde omitió por completo las
relaciones con los pueblos originarios.
“Cuando el Presidente le asignó un mandato específico no mencionó la
situación de los pueblos indígenas. Sin embargo, es un tema ineludible
y pone de relieve la falta de interés del gobierno. Las organizaciones
indígenas están preocupadas de los esfuerzos que hace el Estado chileno
por reconocimiento constitucional de los pueblos originarios, porque
quieren avanzar con el objetivo de limitar y restringir nuestros
derechos”, sostuvo.
Huilcamán indicó que espera que la experiencia adquirida en Educación
le sirva al ministro para aprender y actuar de manera distinta, dejando
atrás conceptos como “El Plan Araucanía” que relaciona a los indígenas
con la pobreza, cuando el tema va mucho más allá, con lo que coincidió
Jorge Huenchullán, werkén de la Comunidad Autónoma de Temucuicui, para
quien con este nombramiento se cierran todas las puertas.
“Consideramos que la única vía que queda es la movilización. Nosotros
vamos a hacer un llamado amplio a las comunidades por la recuperación
del territorio. Tenemos el legitimo derecho de pelear por territorios
ocupados por colonos y empresas forestales y ese es el mensaje que
tenemos”, manifestó Huenchullán.
“Todo el mundo habla de diálogo, pero ¿qué se está dialogando? Nosotros
no estamos dispuestos a sentarnos con personeros de gobierno para ir
a saludarlos y contarles cuántas familias somos y cuáles son nuestras
necesidades básicas”, afirmó el werkén.
Y añadió que el real diálogo se va a dar cuando el gobierno esté
dispuesto a hablar de la devolución de las tierras usurpadas y del
derecho de los pueblos indígenas a una autonomía soberana.