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Director y protagonista de “Torrente” en Chile:

Santiago Segura: “Los cambios vienen de los jóvenes, es algo natural y lógico”

El cineasta español, creador de la hilarante comedia Torrente, llegó al país invitado por el Festival de Cine de Santiago (Sanfic), y aprovechó de destacar la amplia movilización estudiantil y haciendo conexiones con los distintos movimientos sociales en el mundo.

Juan San Cristóbal

  Viernes 19 de agosto 2011 18:03 hrs. 
ssegura

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Santiago Segura se ha ganado un respeto sobre la base de una cultura “cutre”, cine de poco presupuesto y mal gusto que transforma comedias en hitos del celuloide ibérico. Luego del golpe a la cátedra que significó protagonizar “El día de la Bestia” de Alex de la Iglesia, luego se atrevió con Torrente, un policía errático que ya registra una saga de cuatro capítulos.

Torrente 4 es el primer apronte de Segura en 3D, lo que él define como un lujo luego de recibir recomendaciones del propio James Cameron. No obstante, despotrica contra la tecnología y señaló que “una película es buena más allá de si es tridimensional o no”.

Ajeno a la nieve que cubrió la capital, Santiago Segura se mostró fascinado con la masiva marcha estudiantil del pasado jueves, donde más de 120 mil jóvenes salieron a las calles a pesar del mal tiempo, para exigir educación gratuita. “Están locos”, ironizó, pero luego se rectificó y dijo que “la educación es un derecho como comida o trabajo, algo fundamental para un ser humano”.

¿Cómo podrías describir a Torrente, para quien no lo conoce?
Torrente es un policía fascista, machista, racista y alcohólico, entre otras virtudes. Es un tipo despreciable, es franquista, quise hacer un personaje que la gente se sintiera repulsiva hacia él, que le diera mucho asco pero sin irse del cine. Entonces intenté hacerlo humano, y como tal es mezquino, envidioso y egoísta. A mí me resulta tolerable que es ficción y no tiene dinero ni poder, es un paria, entonces no es peligroso, porque vemos gente así pero con poder y con dinero.

¿Qué sorpresas te ha traído Torrente, hoy convertida en saga cinematográfica de culto?
Cuando hice el primer Torrente pensé que era un personaje en extinción, un dinosaurio, pero van doce años e hice la cuarta parte y me da a entender que siguen los tipos recalcitrantes, hemos cambiado muy poco. Me gustaría decir que estamos en el siglo XXI; pero insistimos en la igualdad de la mujer, y es muy triste seguir hablando de lo mismo, ¡es como decir que la población negra tiene los mismos derechos!

¿Qué sacrificios te significa protagonizar la película, con un personaje más gordo que tú?
Soy como Robert De Niro, pero a mí me insultan y a él le dan un Oscar. Yo he engordado cuatro veces para mis películas, en la primera Torrente subí más de 40 kilos. De Niro lo hizo en Los Intocables y Toro Salvaje y su doctor le dijo que no más por no jugar con la salud. Yo lo he hecho cuatro veces, ¿qué espero de esto?, pues una muerte temprana. No hagáis esto en casa.

¿Qué te produce llegar a Santiago y ver una protesta muy similar a lo tienes en Madrid?
Me parece lógico, me congratula saber que la juventud se mueve y reclama, reclama cosas tan lógicas, cosas que caen de cajón. Que los políticos no sean corruptos, que no metan la mano, pero es el problema de los gobernantes. Estoy seguro que los gobernantes chilenos lo escuchan, saben que la demanda es justa, pero una vez ahí, es difícil. Por eso no me dedicaré a la política, poniéndome en los zapatos del otro, si Felipe González dijo no a la OTAN y después pidió apoyar entrar a la OTAN, entonces algo raro hay.

En esa dirección, ¿qué rescatas del papel de los jóvenes en la sociedad actual?
Por fin los jóvenes son jóvenes, no están idiotizados. La revolución y los cambios vienen de los jóvenes, es algo natural y lógico. Un señor de cincuenta años no va a salir a la calle, nevando, a que la educación sea gratuita, lo natural es que los jóvenes salgan y la gente inteligente lo apoye.

¿Cuál es tu posición ante las demandas en Chile por educación gratuita?
(Ironiza) Es horrible, los estudiantes piden educación gratuita, esa gente está loca, es como pedir comida o trabajo, no saben que son derechos fundamentales del ser humano.

Pero no, en serio, me parece bien, la gente cuando no está bien  protesta y eso nos hermana a todos, en España y en Chile estamos todos  jodidos, y estamos descontentos.

¿Qué rescatas del movimiento chileno, a la par con los “indignados” en España?
Estoy de acuerdo, no puedes estar apático, a que alguien arregle las cosas por ti. Si estás en un país donde tienes que ser rico para la universidad, pues sal a la calle y di no. En España vieron que hay mucha corrupción, pues sal a la calle y di no. Para cambiar algo tienes que protestar.

¿Cuál es el papel del cine en la formación de los jóvenes, de la cultura?
El cine siempre ha sido una llave al conocimiento de otras culturas y de nuestra propia historia a través de las películas. Me parece importante, pero no sé dónde va el cine. La gente no quiere escuchar historias, quiere vivirlas, que el videojuego pase por encima del cine en Estados Unidos es un signo, ha cambiado la comercialización del cine, son tiempos revueltos.

Por último, ¿tienes conexiones con Chile, más que esta visita?
Hasta que tu hermana no se casa con un tío de Camerún, no sabes qué pasa con ese país.

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