Una serie de reuniones han tenido los pescadores artesanales y otras organizaciones de Calbuco con las autoridades de las instituciones involucradas en la fiscalización y evaluación del impacto generado por el derrame de petróleo en la Isla Quihua, cercana a Puerto Calbuco, en la X región.

La Planta Pureo, perteneciente a la empresa Copec, es una instalación supuestamente de tecnología avanzada recién inaugurada, sin embargo, el martes en la noche no pudo reaccionar ante la filtración de una de las válvulas del contenedor, provocando el derrame de una cantidad aún indeterminada de petróleo.

A las 10 de esta mañana todos los actores involucrados tuvieron una reunión de emergencia. Hasta caleta La Vega llegaron muy preocupados la federación de merluceros, los sindicatos de buzos mariscadores, abogados ambientalistas, la asociación de sardineros y otras agrupaciones sociales. Reunión que además contó con la presencia del alcalde Rubén Cárdenas, el director regional de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles, SEC y el seremi de Medio Ambiente.

Simón Díaz, presidente de la federación de buzos mariscadores, que trabaja en el área de manejo directamente afectada por el derrame, espera que esto no se transforme en una catástrofe, y señala que eso dependerá de cuánto fue el petróleo que llegó al mar.

En la reunión sostenida con las autoridades fiscalizadoras, los afectados pidieron que se realice un estudio hidrogeológico en el lugar del derrame para analizar hasta donde está contaminada la napa subterránea, además de otro estudio que mida el nivel de hidrocarburos presentes en la poza Pureo, borde costero del sector. Ante esto, Díaz informó que las autoridades se comprometieron a realizar estudios paralelos con expertos que contrasten los resultados que avale la empresa.

“Por eso tienen que arrojarnos los estudios que vamos a exigir a partir de esta reunión, con movilizaciones, con presiones  a la autoridad  y que el gobierno regional coloque recursos para hacer estos dos estudios”, indicó el  presidente de la federación de buzos mariscadores.

El pescador artesanal recorrió ayer en la tarde el borde costero y asegura que el derrame ya alcanzó el mar, porque hay indicios de petróleo en la playa, y en los pozos de dónde saca agua la gente para consumo por ser una zona rural.

Esto lo ratifica Marcelo Soto, presidente de la Federación de Pescadores de Calbuco, quien sospecha que, dado los protocolos de emergencia que maneja la empresa y la planta de tratamiento que tienen preparada para estos casos, el derrame fue mucho mayor que los 30 mil litros que declara Copec.

“Esto va a empezar a empeorar y por eso nosotros estamos muy preocupados porque allí tenemos bases naturales de peces, tenemos concesiones de pescadores, tenemos áreas de manejo de pescadores, hay cultivos particulares de choros. Para nosotros es un problema tremendo porque en el escenario que tenemos hoy como pescadores estamos en situaciones precarias con escasez de todos los recursos y esto empeora más la situación”, señaló Soto.

Pedro Ojeda, presidente de la Unión de Federaciones de Pescadores Artesanales de la región, agregó que ayer tuvieron una reunión con el Intendente Juan Montes, a quien emplazaron a comprometerse con la fiscalización a las industrias que tienen en un estado bastante precario a los pescadores artesanales de la zona.

Además manifiesta que es complejo el escenario para la empresa ya que en su etapa previa “las cosas no transitaron por el camino del diálogo, de participación ni de opinión sobre la instalación de Copec en el sector. La opinión ya se dio en su momento y ahora que suceden las cosas intentan minimizar las cosas para no reproducir este problema que seguramente va a salir con mucha fuerza en la opinión pública como tiene que ser”, señaló Ojeda.

Producto de la reunión, a la que sólo asistió un especialista en medio ambiente representando a la empresa Copec, las organizaciones decidieron interponer un recurso de protección de no innovar ante tribunales para que la planta no siga funcionando hasta que no se sepa cuál es el impacto y alcance del derrame.

Por el momento, Sernapesca ya emitió una resolución por la que se prohíbe la extracción de todo tipo de productos tanto para ser exportados como vendidos a nivel local.