Una delegación no oficial de Corea del Sur se reunió con el nuevo líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, durante su visita a Pyongyang, la capital norcoreana.

La viuda del expresidente surcoreano y la presidenta del grupo automotor Hyundai participaron en las ceremonias fúnebres del dictador norcoreano. Son los únicos extranjeros que asisten a las ceremonias.
Los presidentes de las dos Coreas protagonizaron en el 2000 la primera cumbre intercorena de la historia, y el grupo Hyundai ha financiado varios proyectos en Corea del Norte.

Por otro lado, la transición de poderes se está acelerando en Corea del Norte, desde que Kim Jong-un fuera aclamado como comandante supremo del ejército. Aunque el hijo del fallecido presidente no es aún secretario general del partido único, el anuncio en la prensa estatal significa que pronto asumirá el puesto, el más alto cargo civil de Corea del norte.

Desde la muerte del presidente de Corea del Norte, su vecino del sur ha intentado mantener la calma por miedo a una acción armada norcoreana.