Sanfic: Bajo la sombra de Raúl Ruiz
La octava versión del Festival Internacional de Cine de Santiago tiene en su eslogan - “Si no la ves en Sanfic, no la vas a ver”- una doble lectura ante la pantalla local. Por un lado, exhibe en su parrilla un centenar de películas que recorren el globo a través del lente. Por otro, refleja la precaria programación de la industria cinematográfica en el país.
Martes 21 de agosto 2012 11:17 hrs.
Una golondrina no hace verano. En la parrilla local, “Stefan vs Kramer” se impone como el estreno más visto en la historia, un golpe que remecerá las estadísticas por asistencia a títulos nacionales, pese a que desde el año pasado las cifras vienen en constante baja. Una situación atípica en sí, sumado a un desarrollo voraz de la industria, que en los últimos cinco años ha visto cómo varias producciones chilenas dan la vuelta al mundo, lo que permite que Santiago aparezca en el mapa del celuloide.
Esa es, en cierta medida, la misión de Sanfic, el festival de cine que tiene Santiago, como cualquier capital del mundo que se precie de tal. Una instancia que en ocho años ha mostrado un desarrollo conciso, con distintas sorpresas y estrenos en cada versión. El año pasado, la muerte del maestro Raúl Ruiz golpeó su inauguración, y hoy su figura atraviesa de forma transversal la programación de este festival, vigente hasta el sábado en salas del Cine Hoyts (Parque Arauco y La Reina) y la Cineteca Nacional.
Las competencias internacional y local vienen precedidas por el premio Talento Nacional, lo que da cuenta del interés de incipientes producciones por formar parte de este cartel, así también de cómo el festival se transforma en la plataforma de estas producciones para salir al exterior. Al margen de ello, distintos encuentros académicos son un acercamiento al diálogo en el cine, en torno a la producción de un film, buscar su financiamiento, o simplemente acceder a conversaciones con actores invitados, como Francesca Neri, quien está presente en el estreno de “Una Sconfinata Giovinezza”.
En esta línea, cabe destacar también otras categorías no competitivas, como las ya tradicionales ‘visiones de mundo’, que en esta versión cuentan con una selección del cine de los últimos años en Latinoamérica, Estados Unidos, Francia y Medio Oriente. Al margen de ello, no podemos dejar fuera las “Experiencias”, espacio destinado a películas con un rumbo especial, además de la aproximación a otras artes en Sanfic Música y la selección del cineasta ruso Victor Kossakovsky.
El omnipotente Ruiz
El lunes la fiesta se trasladó a la Estación Mapocho, donde un concierto de la Sinfónica de la Universidad de Santiago (Usach) musicalizó piezas de Jorge Arriagada, compositor de la música de gran parte de los títulos de Ruiz. El músico cuenta con una dilatada trayectoria europea, pero en Chile su nombre no está entre los más conocidos, ni tampoco las entidades responsables han destacado su labor. Un tópico folclórico en el mundo del arte.
En pantalla, el martes 21 se estrena “La Noche de Enfrente”, un título póstumo que se convierte en la despedida del director. Miembros del equipo en este título participaron de las charlas de Sanfic, quienes señalaron que Ruiz había adelantado bastante la tarea, sólo quedando el montaje pendiente, sin alteración de sus ideas originales.
Ya el lunes, en la Cineteca, se emitió “La Comedia de la Inocencia”, y este miércoles a las 15.30 en la misma sala se proyectará “Misterios de Lisboa”. Este título radica su valor en ser la última apuesta que tuvo el director en cartelera. Una cinta de no menores 266 minutos (sí, cuatro horas y media), que bien resume la intención de su cine: historias que aparecen, deambulan por un escenario imaginario, historias y desencuentros, la vida en otra velocidad. Su estreno en dos mitades estrenadas con semanas de diferencia mermó en su apreciación, aplaudido en todo el mundo, y que esta semana, quizá por única vez, se podrá ver de forma íntegra en la capital.
Otros títulos
En la misma Cineteca (vale decir que en esta sala las entradas están más baratas, $1500, en comparación al Hoyts donde no suben mucho, $2500), el miércoles a las 20.15 se estrena Klimt, otra producción de Ruiz donde John Malkovich interpreta a Gustav Klimt, pintor austriaco muy en boga estos días, al cumplirse 150 años de su nacimiento.
Y sorpresas no hay pocas. Podemos destacar el estreno de Wes Anderson, “Moonrise Kingdom” (Jueves 24), un título que confirma a este novel director dentro de las sorpresas del nuevo siglo, un nombre ineludible en el nuevo cine norteamericano. Por otro lado, tenemos también este martes la proyección de “Un Dios Salvaje”, la película que dirigió Roman Polanski, que sucede a “Ghost Writer” en su filmografía, pero tiene en su particularidad ser el título que lo devuelve a las salas, luego de un breve período bajo arresto por acusaciones de abuso sexual.
Al cierre, este viernes es el turno de “El gran sueño de Konrad Koch”, una emotiva cinta dedicada al fútbol y la pedagogía en Alemania. En proyección a las 22 horas, el mismo horario destinado para las películas ganadoras. También vale destacar “El niño de la bicicleta”, de los hermanos Jean-Pierre y Luc Dardenne, a las 20 horas de jueves en la Cineteca. Como se puede ver, títulos para todos los gustos, una semana atípica para Santiago, cuando Sanfic abre la ventana del mundo a través de la magia del cine.
Una golondrina no hace verano. En la parrilla local, “Stefan vs Kramer” se impone como el estreno más visto en la historia, un golpe que remecerá las estadísticas por asistencia a títulos nacionales, pese a que desde el año pasado las cifras vienen en constante baja. Una situación atípica en sí, sumado a un desarrollo voraz de la industria, que en los últimos cinco años ha visto cómo varias producciones chilenas dan la vuelta al mundo, lo que permite que Santiago aparezca en el mapa del celuloide.
Esa es, en cierta medida, la misión de Sanfic, el festival de cine que tiene Santiago, como cualquier capital del mundo que se precie de tal. Una instancia que en ocho años ha mostrado un desarrollo conciso, con distintas sorpresas y estrenos en cada versión. El año pasado, la muerte del maestro Raúl Ruiz golpeó su inauguración, y hoy su figura atraviesa de forma transversal la programación de este festival, vigente hasta el sábado en salas del Cine Hoyts (Parque Arauco y La Reina) y la Cineteca Nacional.
Las competencias internacional y local vienen precedidas por el premio Talento Nacional, lo que da cuenta del interés de incipientes producciones por formar parte de este cartel, así también de cómo el festival se transforma en la plataforma de estas producciones para salir al exterior. Al margen de ello, distintos encuentros académicos son un acercamiento al diálogo en el cine, en torno a la producción de un film, buscar su financiamiento, o simplemente acceder a conversaciones con actores invitados, como Francesca Neri, quien está presente en el estreno de “Una Sconfinata Giovinezza”.
En esta línea, cabe destacar también otras categorías no competitivas, como las ya tradicionales ‘visiones de mundo’, que en esta versión cuentan con una selección del cine de los últimos años en Latinoamérica, Estados Unidos, Francia y Medio Oriente. Al margen de ello, no podemos dejar fuera las “Experiencias”, espacio destinado a películas con un rumbo especial, además de la aproximación a otras artes en Sanfic Música y la selección del cineasta ruso Victor Kossakovsky.
El omnipotente Ruiz
El lunes la fiesta se trasladó a la Estación Mapocho, donde un concierto de la Sinfónica de la Universidad de Santiago (Usach) musicalizó piezas de Jorge Arriagada, compositor de la música de gran parte de los títulos de Ruiz. El músico cuenta con una dilatada trayectoria europea, pero en Chile su nombre no está entre los más conocidos, ni tampoco las entidades responsables han destacado su labor. Un tópico folclórico en el mundo del arte.
En pantalla, el martes 21 se estrena “La Noche de Enfrente”, un título póstumo que se convierte en la despedida del director. Miembros del equipo en este título participaron de las charlas de Sanfic, quienes señalaron que Ruiz había adelantado bastante la tarea, sólo quedando el montaje pendiente, sin alteración de sus ideas originales.
Ya el lunes, en la Cineteca, se emitió “La Comedia de la Inocencia”, y este miércoles a las 15.30 en la misma sala se proyectará “Misterios de Lisboa”. Este título radica su valor en ser la última apuesta que tuvo el director en cartelera. Una cinta de no menores 266 minutos (sí, cuatro horas y media), que bien resume la intención de su cine: historias que aparecen, deambulan por un escenario imaginario, historias y desencuentros, la vida en otra velocidad. Su estreno en dos mitades estrenadas con semanas de diferencia mermó en su apreciación, aplaudido en todo el mundo, y que esta semana, quizá por única vez, se podrá ver de forma íntegra en la capital.
Otros títulos
En la misma Cineteca (vale decir que en esta sala las entradas están más baratas, $1500, en comparación al Hoyts donde no suben mucho, $2500), el miércoles a las 20.15 se estrena Klimt, otra producción de Ruiz donde John Malkovich interpreta a Gustav Klimt, pintor austriaco muy en boga estos días, al cumplirse 150 años de su nacimiento.
Y sorpresas no hay pocas. Podemos destacar el estreno de Wes Anderson, “Moonrise Kingdom” (Jueves 24), un título que confirma a este novel director dentro de las sorpresas del nuevo siglo, un nombre ineludible en el nuevo cine norteamericano. Por otro lado, tenemos también este martes la proyección de “Un Dios Salvaje”, la película que dirigió Roman Polanski, que sucede a “Ghost Writer” en su filmografía, pero tiene en su particularidad ser el título que lo devuelve a las salas, luego de un breve período bajo arresto por acusaciones de abuso sexual.
Al cierre, este viernes es el turno de “El gran sueño de Konrad Koch”, una emotiva cinta dedicada al fútbol y la pedagogía en Alemania. En proyección a las 22 horas, el mismo horario destinado para las películas ganadoras. También vale destacar “El niño de la bicicleta”, de los hermanos Jean-Pierre y Luc Dardenne, a las 20 horas de jueves en la Cineteca. Como se puede ver, títulos para todos los gustos, una semana atípica para Santiago, cuando Sanfic abre la ventana del mundo a través de la magia del cine.
Una golondrina no hace verano. En la parrilla local, “Stefan vs Kramer” se impone como el estreno más visto en la historia, un golpe que remecerá las estadísticas por asistencia a títulos nacionales, pese a que desde el año pasado las cifras vienen en constante baja. Una situación atípica en sí, sumado a un desarrollo voraz de la industria, que en los últimos cinco años ha visto cómo varias producciones chilenas dan la vuelta al mundo, lo que permite que Santiago aparezca en el mapa del celuloide.
Esa es, en cierta medida, la misión de Sanfic, el festival de cine que tiene Santiago, como cualquier capital del mundo que se precie de tal. Una instancia que en ocho años ha mostrado un desarrollo conciso, con distintas sorpresas y estrenos en cada versión. El año pasado, la muerte del maestro Raúl Ruiz golpeó su inauguración, y hoy su figura atraviesa de forma transversal la programación de este festival, vigente hasta el sábado en salas del Cine Hoyts (Parque Arauco y La Reina) y la Cineteca Nacional.
Las competencias internacional y local vienen precedidas por el premio Talento Nacional, lo que da cuenta del interés de incipientes producciones por formar parte de este cartel, así también de cómo el festival se transforma en la plataforma de estas producciones para salir al exterior. Al margen de ello, distintos encuentros académicos son un acercamiento al diálogo en el cine, en torno a la producción de un film, buscar su financiamiento, o simplemente acceder a conversaciones con actores invitados, como Francesca Neri, quien está presente en el estreno de “Una Sconfinata Giovinezza”.
En esta línea, cabe destacar también otras categorías no competitivas, como las ya tradicionales ‘visiones de mundo’, que en esta versión cuentan con una selección del cine de los últimos años en Latinoamérica, Estados Unidos, Francia y Medio Oriente. Al margen de ello, no podemos dejar fuera las “Experiencias”, espacio destinado a películas con un rumbo especial, además de la aproximación a otras artes en Sanfic Música y la selección del cineasta ruso Victor Kossakovsky.
El omnipotente Ruiz
El lunes la fiesta se trasladó a la Estación Mapocho, donde un concierto de la Sinfónica de la Universidad de Santiago (Usach) musicalizó piezas de Jorge Arriagada, compositor de la música de gran parte de los títulos de Ruiz. El músico cuenta con una dilatada trayectoria europea, pero en Chile su nombre no está entre los más conocidos, ni tampoco las entidades responsables han destacado su labor. Un tópico folclórico en el mundo del arte.
En pantalla, el martes 21 se estrena “La Noche de Enfrente”, un título póstumo que se convierte en la despedida del director. Miembros del equipo en este título participaron de las charlas de Sanfic, quienes señalaron que Ruiz había adelantado bastante la tarea, sólo quedando el montaje pendiente, sin alteración de sus ideas originales.
Ya el lunes, en la Cineteca, se emitió “La Comedia de la Inocencia”, y este miércoles a las 15.30 en la misma sala se proyectará “Misterios de Lisboa”. Este título radica su valor en ser la última apuesta que tuvo el director en cartelera. Una cinta de no menores 266 minutos (sí, cuatro horas y media), que bien resume la intención de su cine: historias que aparecen, deambulan por un escenario imaginario, historias y desencuentros, la vida en otra velocidad. Su estreno en dos mitades estrenadas con semanas de diferencia mermó en su apreciación, aplaudido en todo el mundo, y que esta semana, quizá por única vez, se podrá ver de forma íntegra en la capital.
Otros títulos
En la misma Cineteca (vale decir que en esta sala las entradas están más baratas, $1500, en comparación al Hoyts donde no suben mucho, $2500), el miércoles a las 20.15 se estrena Klimt, otra producción de Ruiz donde John Malkovich interpreta a Gustav Klimt, pintor austriaco muy en boga estos días, al cumplirse 150 años de su nacimiento.
Y sorpresas no hay pocas. Podemos destacar el estreno de Wes Anderson, “Moonrise Kingdom” (Jueves 24), un título que confirma a este novel director dentro de las sorpresas del nuevo siglo, un nombre ineludible en el nuevo cine norteamericano. Por otro lado, tenemos también este martes la proyección de “Un Dios Salvaje”, la película que dirigió Roman Polanski, que sucede a “Ghost Writer” en su filmografía, pero tiene en su particularidad ser el título que lo devuelve a las salas, luego de un breve período bajo arresto por acusaciones de abuso sexual.
Al cierre, este viernes es el turno de “El gran sueño de Konrad Koch”, una emotiva cinta dedicada al fútbol y la pedagogía en Alemania. En proyección a las 22 horas, el mismo horario destinado para las películas ganadoras. También vale destacar “El niño de la bicicleta”, de los hermanos Jean-Pierre y Luc Dardenne, a las 20 horas de jueves en la Cineteca. Como se puede ver, títulos para todos los gustos, una semana atípica para Santiago, cuando Sanfic abre la ventana del mundo a través de la magia del cine.
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