La Contraloría General de la República ordenó un sumario en Subsecretaría de Pesca por irregularidades en cuotas de extracción.
El informe del organismo fiscalizador reveló que al amparo de permisos para “fines de investigación”, se escondieron actividades comerciales de distintas empresas, aún cuando la ley lo prohíbe expresamente.
Las autorizaciones fueron extendidas en 2011, al amparo del titular Pablo Galilea. El Jurel, el Pejerrey, el Bacalao de profundidad, las rayas, la merluza, entre otros, sufrieron los rigores del desorden que estableció la Contraloría.