Juan Pablo Jiménez, presidente del sindicato de Azeta, fue encontrado sin vida y con una fractura craneal en su lugar de trabajo, el pasado jueves cerca de las 15:30 horas, mientras se disponía a efectuar una denuncia producto de los abusos laborales en la empresa contratada por Chilectra.
En esa línea, la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, recalcó la decisión de solicitar al Fiscal Nacional, Sabás Chahuán, “una investigación seria y prolija”, y apuntó que “solicitamos una entrevista con el Fiscal Nacional, porque dentro de la ley del Ministerio Público, existe incluso la posibilidad de que el Fiscal Nacional, ante hechos de envergadura tan grave, pueda disponer al Fiscal Metropolitano para hacerse cargo de la causa. Lo que demandamos es una investigación profunda, seria, responsable y prolija respecto a qué fue lo acontecido, y no quedarnos sólo con un primer informe, porque si tenemos dudas es que le estamos haciendo un daño a la democracia”.
El homicidio no esclarecido del dirigente “revela la violencia que viven todos los días los trabajadores en la representación de sus asociados”, manifestó Bárbara Figueroa, recalcando que esta situación se repite transversalmente en América Latina, registrando por ejemplo tres muertes en Colombia, sólo en lo que ha transcurrido el 2013.
Por lo mismo, la presidenta de la CUT señaló que solicitarán que se investigue profundamente el caso Jiménez, por cuanto “es un hecho de suma gravedad, que afecta y daña a todos los chilenos”.