España registró en febrero 59.444 desempleados más que en enero, lo que representa un aumento de 1,19%, según las cifras trimestrales difundidas por el ministerio. El paro aumentó en todos los sectores, empezando por los servicios, con 39.788 desempleados más, un incremento de 1,28% respecto a enero.

El ministerio destaca no obstante que se trata del menor incremento del paro en un mes de febrero desde el año 2008. El número de desempleados en España volvió a subir en enero (+2,72%), tras una pequeña caída en diciembre (-1,2%). En términos interanuales, el ministerio registró 328.124 parados más (+6,96%), alcanzando un récord histórico de 5.040.222 desempleados.

Estos datos del ministerio de Empleo y Seguridad Social son distintos de los publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que utiliza un método de cálculo distinto y sirve de referencia. Según el INE, la tasa de desempleo batió un récord a fines de diciembre, alcanzando 26,02% de la población activa y afectando a 5.965.400 personas.

Adicionalmente, según cifras oficiales divulgadas el jueves pasado, la recesión se agravó en España en el último trimestre de 2012 con una caída intertrimestral del 0,8% del Producto Interior Bruto por la caída de la demanda interna. Con este retroceso a final de año, la economía española se contrajo un 1,4% en el conjunto de 2012, un resultado ligeramente mejor a la caída del 1,5% prevista por el Gobierno.

Tras un retroceso del 0,3% en el tercer trimestre, la caída del PIB se acentuó entre octubre y diciembre de 2012 hasta el 0,8% del PIB, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE). Esta agudización de la contracción económica en España, en recesión desde finales de 2011, se debe a “una mayor contracción de la demanda nacional”, señaló el INE en un comunicado.

Se prevé que la recesión se alargue en 2013 en España, un país con un desempleo récord superior al 26% y sumido en un esfuerzo de austeridad económica sin precedentes para ahorrar 150.000 millones de euros hasta finales de 2014.

Si bien el Gobierno prevé para este año una caída del 0,5% del PIB, las estimaciones de la Comisión Europea son mucho más pesimistas y anuncian una contracción del 1,4% antes de volver a la senda del crecimiento en 2014. La economía española, sacudida desde el estallido de la burbuja inmobiliaria en 2008, cayó un 3,74% en 2009. Aunque salió de la recesión en 2010, volvió a ella a finales de 2011.