El personal de la Unidad de Inteligencia de Carabineros detuvo a Tatiana Córdova Marinao, pareja de Celestino Córdova Tránsito, el machi imputado por el crimen del matrimonio Luchsinger Mackay, quienes fallecen al interior de su residencia, incendiada el pasado 4 de enero de este año.

La también machi mantenía una orden de detención vigente del Juzgado de Garantía de Temuco por el delito de desórdenes en un evento público que se realizó en una de las visitas del Presidente Piñera a la zona. Además de ella fueron detenidas las dos voceras de Córdova, quienes fueron formalizadas el miércoles pasado.

Una de ellas, Kelly Tranamil, afirmó que las detenciones fueron violentas y apuntó a irregularidades en el trato a las comuneras: “El trato fue vejatorio, racista desde Carabineros, sobretodo con la machi de quien se burlaron por sus vestimentas, quien resistió a desvestirse. Se sacó una fotografía con carabineros que se exhibe públicamente, entonces incluso el fiscal pidió investigación sobre esa imagen”.

Las dirigentes fueron requeridas en el funeral del abuelo de Kelly Tranamil, y luego la joven asistió a tribunales a presentarse de forma voluntaria, pero no la dejaron entrar, supuestamente, “porque no se encontraban en horario de atención”, por lo que se ofició a la Corte para dar explicaciones por este acto irregular.

La abogada del Centro de Defensa Sur, Karina Riquelme, una de los juristas que lleva la causa del machi Celestino Córdova, afirmó que esto no es más que una persecución al círculo íntimo del comunero y atenta también contra el trabajo de su defensa.

“Ellas pasaron una noche detenida, en virtud de una causa que se determina una detención ilegal. Hay afectación directa a la defensa del machi, porque preparamos la defensa con los familiares, y no podemos reunirnos con ellas por estar detenidas, ante la criminalización de las personas que rodean al machi”, indicó.

La vocera indicó que a los abogados defensores se les ha dado plazos muy cortos para asumir la causa. Recordemos que Celestino Córdova rechazó a los defensores públicos y optó por una defensa privada que contó sólo con tres días antes de asistir a la preparación de juicio oral. Por ello se realizaron varias solicitudes para aplazar el proceso, pero no lograron obtener mucho más tiempo.

De hecho el abogado Pablo Ortega denunció que esto vulneraba los derechos de la defensa y, por ende, del procedimiento judicial en un juicio sumamente delicado por la magnitud de la acusación, cuando la muerte de los agricultores fue ampliamente repudiada y cuando el Gobierno lo relacionó, casi de forma inmediata, con la protesta y las reivindicaciones del pueblo mapuche, lo que también fue cuestionado.

Así, en un clima tenso se desarrollará el próximo lunes la última parte de la audiencia de preparación de juicio oral, con la exposición de los peritajes, las solicitudes de exclusión de pruebas y la presentación de pruebas de la defensa. El proceso podría extenderse por tres días y al finalizar se fijará la fecha para el juicio definitivo.