La Asociación de Gendarmes de Chile denunció que los funcionarios de la cárcel de Chillán deben cumplir 18 días seguidos de trabajo para optar a una jornada de descanso en el sistema de turnos que rige a quienes hacen guardia en el perímetro de la cárcel de Chillán.
Según la organización este panorama se repite en todas las cárceles del país con un mínimo de doce días consecutivos de labores para recién optar a uno libre.
Por su lado, el presidente nacional de los gendarmes, Oscar Ulloa, dijo que es imposible poder desarrollar un buen trabajo con un sistema que definió como “explotador y al décimo día ya nadie trabaja como corresponde”, insistió.