Durante la semana le habían pedido a Sabas Chahuán sacar al fiscal Luis Toledo de la investigación del caso Caval.
La petición hecha por el abogado querellante Mario Zumelzu se basaba en la postulación que el fiscal de la región de O´ higgins hiciera para el cargo de Fiscal Nacional.
El actual jefe del Ministerio Público se negó a inhabilitar a Toledo, argumentando que “si bien los hechos que fundan la petición son efectivos y de público conocimiento, no se vislumbra en qué forma ellos pueden configurar las causales de inhabilidad invocadas”.
Sin embargo, Sabas Chahuán si aceptó la solicitud del propio Toledo, para ser sacado temporalmente de la causa, hasta que se determine quien será el próximo persecutor nacional.
La petición de Toledo tiene como “único fundamento cautelar la imagen pública de la institución, evitando interpretaciones equivocas o malintencionadas”.
Otros de los motivos que pudieron haber llevado a Chahuán a acceder a la petición serían las próximas diligencias. Entre ellas, las posibles formalizaciones de Sebastián Dávalos o Natalia Compagnon.
Por este periodo de tiempo, el fiscal de La Araucanía, Cristian Paredes, tomará el mando de la investigación. Aunque éste podría designar a otro persecutor de la fiscalía de Rancagua para que siga de forma “operativa” la causa.