Estimado Juan Pablo:
Ayer celebré en los comentarios abiertos tu análisis sobre los hechos de París. Lo hice dentro de la cantidad de comentarios (de algunos) marcados por la hipocresía y por la complacencia con los crímenes cuando estos vienen de occidente.
Quiero transmitirte un poco en la misma línea de lo que fueron las elecciones acá en Canadá y su relación con estos acontecimientos.
El Partido Liberal triunfante con Trudeau a la cabeza, en una de sus promesas de campaña, prometió retirar sus fuerzas de combate que bombardeaban Syria. El Premier anterior había puesto gran cantidad de recursos en esa alianza, incluso, solo dos días antes del atentado en París, los bombarderos canadienses atacaron posiciones de ISIS, supuestamente sin víctimas inocentes. El nuevo gobierno canadiense estaba recién asumiendo el mando.
Canadá fue advertido y amenazado por ISIS por esta acción y prometieron venganza.
El debate ahora acá en todos los medios, especialmente quienes sirven abierta o encubiertamente a los poderosos de siempre que quieren conquistar el mundo a punta de bombardeos y crímenes, es si Trudeau debe o no mantener su promesa de campaña frente al conflicto del Medio Oriente, ahora a posterior de esos atentados.
Aún más, en esa misma campaña, se comprometieron a aceptar a 25 mil refugiados Syrios antes del 31 de diciembre de este año. Por problemas de seguridad y por los hechos ocurridos, también se están preguntando si aceptar o no a esos refugiados.
Trudeau ha respondido que sus promesas de campaña no van a cambiar, pero sí podrán tener algunos ajustes en su implementación.
En cuanto a la participación en combate, señaló que suspendería los ataques aéreos y apoyarían con tropas al entrenamiento de las fuerzas en Irak.
En cuanto a los refugiados, señaló que se mantenía el plan, pero se aumentaría el control y el estudio de cada uno de los refugiados que ingresaran al país.
Finalmente, te puedo decir que existe un miedo importante en la población civil, hay una paranoia colectiva. En el centro de Toronto una mujer musulmana fue agredida por otros “ciudadanos”. En fin, muchos se preguntan qué pasaría si es que por primera vez, los canadienses se vieran enfrentados a un atentado terrorista en algún centro comercial o lugar público con víctimas inocentes.
En otro suburbio industrial, todo el mundo comenzó a llamar a sus casas porque se “rumoreaba” que se había iniciado un enfrentamiento casi global en esa zona y que Rusia había movilizado sus tropas en contra, por lo tanto se hablaba que se había iniciado una tercera guerra mundial.
Felicitaciones una vez más por tu comentario valiente y un gran saludo a la distancia.
Horacio Campos
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