Señor Director:
Mediante esta carta, quiero denunciar una situación vivida por mi pareja.Ella, nacida en Villarrica y viviendo actualmente en Talcahuano, adquirió un terreno de 5.000 mts. en su natal Villarrica.
La idea era vivir allá, pero por circunstancias de tipo económico, decide vender dicho sitio. Una amiga de infancia de ella y compañera de colegio por varios años, la Sra. Mónica López Arriagada, con residencia en Pucón y dedicada al corretaje de propiedades y otros negocios, le ofrece venderle su terreno explicándole que la experiencia de años que posee permitirán que se venda rápido. Mi Pareja, Dina Cárcamo Godoy, confió en ella, pues fueron muy amigas de infancia y ya que reside en Talcahuano, le sería más fácil que alguien estuviera en Villarrica.
Esta confianza se vio reflejada en un poder notarial que mi pareja otorgó a la Sra López Arriagada, basado en el cariño y la confianza. Pero todo comenzó a cambiar, ella vendió mil metros de los cinco mil, pero le solicitó la mayor parte de ese dinero para otros negocios en donde mi pareja supuestamente también ganaría. Dina, nunca vio ese dinero desde diciembre de 2016 hasta abril de 2017, a pesar de las constantes llamadas, la sra Lopez Arriagada siempre se excusaba.
Dina, revocó el mandato a la Sra. Lopez en marzo del 2017, pero la corredora vendió otro mil metros sin darle, nuevamente, absolutamente nada a mi pareja. El tema es que hoy no puede vender su terreno por todos los líos y fraudes que ha cometido la supuesta amiga. Esta sra Mónica Lopez Arriagada, es conocida en la zona de la Araucanía por estafadora y tiene varios juicios. Mi pareja no sabía de esto y fue muy inocente.
¿Cómo dar a conocer casos como este?, ¿por qué permitir que esta señora, siga delinquiendo, engañando a personas de esfuerzo, estafando de esta manera?, ¿es que acaso la justicia chilena ampara a estos delincuentes?
Solo pido un poco de justicia con mi pareja y con las decenas de personas que estafó y sigue estafando la señora Mónica López Arriagada con la benevolencia de la justicia en mi país.
El contenido vertido en esta Carta al director es de exclusiva responsabilidad de su autor y no refleja necesariamente la posición de Diario y Radio Universidad de Chile.