Tal como los peregrinos han salido a celebrar la venida del Papa Francisco, los manifestantes en contra de abusos sexuales que han cometidos sacerdotes se han congregado en las calles por donde ha transitado el papa móvil.
En el marco de la marcha por los pobres desarrollada en la calle Vicuña Mackenna, carabineros detuvo a 22 personas que buscaban manifestar su posición frente al comportamiento de algunos miembros del clero chileno y mostrar su repudio a los encubridores de abusos sexuales.
La detención de estas personas fue totalmente injustificada, según explicó Manuel Andrade, miembro de la Comision de Ética Contra la Tortura. “Fue una manifestación pacífica en torno a las demandas que tenía este movimiento, dando cuenta de las situaciones de inequidad e injusticia social en el marco de la visita del papa y la protección a abusadores sexuales dentro de la iglesia como el obispo de Osorno. Temas sociales que se querían relevar. No se alcanzó a hacer ningún tipo de manifestación de moverse al interior de la calle porque fueron detenidos y luego pasó toda esta situación”.
Dentro de los 22 detenidos había dos menores de edad de 15 y 16 años. Una vez que carabineros detuvo a estas personas fueron subidos a un carro lanza gases y fuerzas especiales los llevó a la 33 comisaria de Santiago donde fueron retenidos en un calabozo.
Manuel Andrade, miembro de la Comisión Ética Contra la Tortura dijo que entre las personas que fueron detenidas estaba Roberto D’Orival un destacado defensor de derechos humanos y dos menores de edad. “No era manifestantes violentistas, eran personas pacíficas que se manifestaban y que fueron reprimidos y detenidos al interior del zorrillo para luego pasearlos por todo Santiago antes de llegar a la comisaría”.
La comisión ética contra la tortura tomó razón de esta detención y envió la información al instituto de Derechos Humanos para que tomara posición respecto a la represión que carabineros ha generado en contra de quienes se han manifestado durante esta jornada.