Angulema se convierte cada año en la meca del llamado noveno arte. Durante cuatro días, esta pequeña ciudad al pie del río Charente es la vitrina para miles de autores y editores de historietas venidos de todo el mundo, a los que se suman unos 250.000 fanáticos que recorren los 26 lugares de exposición y ventas del festival.
En los concurridos pasillos del galpón llamado Nuevo Mundo, nos encontramos el stand de la delegación de Chile, país que mostró no sólo la producción de historieta más reciente sino la historia del cómic y la sátira política chilenos.
“Esta historia data de 1858, cuando comenzaron a publicarse los primeros cómics en periódicos pequeños tipo tabloide. Allí las caricaturas eran de tamaño muy grande, a veces llenaban una página completa, y fueron muy populares hasta principios del siglo XX. Se atacaba a los poderes políticos y religioso, lo que le valió a varios dibujantes de ser excomulgados o incluso fusilados. Después, durante la dictadura, la situación fue muy dura para los caricaturistas, muchos se fueron al exilio, y la historieta desapareció completamente. Recién a fines de los 80 volvió a remontar con autores como Fito Manga, Pedro Prado, Félix Vega, Gonzalo Martínez y autores que se están dedicando al mercado infantil”, explicó a RFI Moisés Hasson de la editorial Nauta Colecciones.
En Angulema estuvieron varios de esos nuevos autores chilenos, entre ellos Daniela Thiers, la creadora de una serie para niñas y adolescentes que se ha convertido en un bestseller, Alegría y Sofía con un estilo muy parecido al manga, pero que incorpora elementos locales chilenos.
“Esta historieta apareció por primera vez en mi página web. Se trata de dos amigas muy divertidas pero muy diferentes. Alegría odia su nombre y le gustan las películas de terror, mientras que Sofía es todo lo contrario, es dulce y amorosa. Cada libro tiene dos partes: la primera con tiras cómicas y luego una historia que incluye elementos muy chilenos, incluso de la cultura y leyendas mapuche”, declaró Daniela Thiers.
Thiers estuvo acompañada en Angulema de su editora, Francisca Cárcamo, fundadora de Pánico Ediciones, una casa independiente dedicada a promover la historieta y educar nuevos lectores.
“La historieta chilena actual tiene estilos muy distintos, tiene humor, hay acción, cómic hindi, histórico, infantil. Nos hemos dedicado a fomentar la historieta como una manera para formar lectores. Que esos niños que hoy tienen menos de 10 o 15 años, el día de mañana sean lectores ávidos. Eso para mí sería el pago máximo a todo el trabajo y sacrificio que ha sido levantar un negocio sola”, expresó Cárcamo.
Los editores y autores chilenos también impartieron una conferencia en el Festival de Angulema y esperan penetrar el competitivo mercado francés de la historieta.