Las comunas que circundan el Lago Llanquihue se han trasformado en un paraje popular durante los veranos: deportes náuticos, turistas bañándose con el volcán Osorno de fondo y las típicas comidas del sector.
Dicha condición ha generado un crecimiento exponencial en la demografía, puesto que Puerto Varas, Llanquihue, Frutillar, Ensenada y Puerto Octay ,cada día reciben a más residentes que han ampliado estas ciudades.
Por más de un año los alcaldes de las comunas de la ribera del Lago han denunciado que la empresa sanitaria Essal utiliza los aliviaderos de aguas lluvias de forma indiscriminada, vertiendo residuos domiciliarios y contaminando constantemente el acuífero.
Los actores en este conflicto no son solo las comunidades, ni el municipio, ni la empresa sanitaria, sino que el gobierno central tiene una responsabilidad fundamental, ya que en las comunas antes nombradas no tienen los suficientes colectores de aguas lluvias, generando que todas las precipitaciones lleguen a la red de alcantarillando, colapsando el sistema.
La construcción de los colectores es responsabilidad del Ministerio de Obras Públicas y se debe ejecutar a través del desarrollo de un plan maestro, el cual, según explicó el Seremi de Obras Públicas de la región de los Lagos, James Fy “la Contraloría General de la República no ha generado las acciones pertinentes para destrabar la toma de razón de los planes maestros”.
“Ya está listo el plan maestro de aguas lluvias y servidas donde se puntualiza la separación de estos dos tipos de aguas. El ministerio de Obras Públicas debería entregar el financiamiento, pero como esto es una fuerte inversión y las platas no lucen en votos, se dejan olvidados. Se tramita y burocratiza el diseño del plan maestro que está hecho. El ministerio de Vivienda y Urbanismo también le cabe responsabilidad, porque no se deberían autorizar la cantidad de construcciones de viviendas en ciertas poblaciones si no están las condiciones sanitarias para las viviendas a construir”, denuncia el alcalde de Puerto Varas, Ramón Bahamondes.
Siguiendo el hilo de la discusión, el Seremi de Obras Públicas le dio la razón al alcalde de Puerto Varas, expresando que “está en lo cierto, el plan maestro está terminado igual que el de Ancud, incluso lo derivamos al nivel central de obras públicas, porque la Contraloría General de la República no ha aprobado ningún plan maestro de aguas lluvias en los últimos cuatro años, y eso, vamos a tener que verlo con ese organismo. Por lo mismo, viajaré a Santiago para reunirme con la directora general y el ministro, porque nos están solicitando lo mismo de Alerce, Ancud y Puerto Varas. Tenemos que generar una mesa con la Contraloría para destrabar la toma de razón de esos planes, porque si no están las firmas de los ministro,s no tengo ninguna forma de intervenir”.
La autoridad regional frente a la situación que por más de un año aqueja a las comunas del Lago Llanquihue, dijo que desarrollará una mesa de trabajo con la directora general de obras públicas y Contraloría General de la República para después conseguir los recursos y desarrollar las obras civiles de los colectores.
Contaminación en el Río Maullin
Durante este miércoels, se desarrolló una inspección en el río Maullin, luego que el alcalde de Llanquihue, Víctor Angulo, denunciara que en este sector también existía un ducto de aguas servidas que estaba contaminando el cauce, que es la puerta de salida del lago.
En la instancia fiscalizadora participó el Seremi de Medio Ambiente y autoridades municipales que anunciaron que también desarrollarían su propio muestreo para levantar estudios sobre las condiciones de contaminación que se han generado producto del vertimiento ilegal de aguas no tratadas.
El edil de Llanquihue culpó a la empresa sanitaria que es la responsable de la operatividad, ya que “aun cuando hay responsabilidades compartidas en lo público y privado, el principal responsable y articulador de esto son ellos, porque su servicio no es gratis. A todos nos cobran por desarrollar su operación, por lo mismo, deben hacerlo de buena forma, porque hasta este momento el trabajo no es lo que nosotros esperamos”.
Asimismo, Angulo hizo referencia a la falta de fiscalización por parte de la Superintendencia de Servicios Sanitarios que, según el Edil, no ha efectuado fiscalizaciones rigurosas ni sistemáticas, lo que el alcalde atribuye a la falta de recursos y de funcionarios de estos servicios.
“Aquí tiene que haber una mayor fiscalización de la Superintendencia de Servicios Sanitarios, la que ha sido nula. Tiene que existir un plan de monitoreo y comenzar a desarrollarse los estudios para una normativa secundaria al río Maullin, lo que permitiría que existieran fiscalizaciones mucho más exhaustivas para este cauce”, profundizó el alcalde de Llanquihue.
El gerente de comunicaciones de Essal, Juan Pablo Riquelme, frente al vertimiento ilegal de aguas servidas al río Maullin, expresó a Radio Bio Bio que “acá es muy importante hacer un llamado a la comunidad y a los vecinos en general a no recargar el sistema de aguas servidas, evitando la incorporación de las aguas lluvias y también aguas de napas subterráneas a través de conexiones irregulares o a través de la apertura de las tapas de las cámaras de la red de alcantarillado, porque muchas veces las están ocupando como mecanismo de control de inundación, eso es lo que en las últimas horas podría afectar nuestra operación”.
Por su parte, el alcalde de Llanquihue, contradijo la posición del representante de la empresa diciendo que “es vergonzoso escuchar o leer en medios locales que la empresa, a partir de un argumento tan burdo como que se está descargando aguas servidas al río porque ha habido un aumento en las precipitaciones, cuando en la zona no ha llovido y nosotros fuimos testigos de cómo se descargaba directamente agua sucia al igual que en el lago Llanquihue, me parece que es un argumento que no corresponde. Esto pasa por un cambio en la legislación, ya que hoy caen dos gotas y a la empresa se le permite hacer las descargas sin ningún tipo de tratamiento, yo creo que para entregar una solución hay que desarrollarla de forma integral”.
Una de las ideas de la empresa Essal es la ampliación de la planta de tratamiento de aguas servidas que hoy funciona en la comuna de Llanquihue y que abastece a las diferentes comunas de la ribera. Frente a esto, el alcalde Víctor Angulo fue tajante al decir: “Hablo en representación de toda la comuna de Llanquihue, nosotros no vamos a permitir bajo ningún punto de vista la ampliación de la planta de tratamiento. Creemos que lo correcto y lo justo es que Essal invierta los recursos necesarios en una planta en Puerto Varas, porque no nos parece digno que nosotros sigamos soportando las descargas de otras comunas. Yo creo que acá si ellos tienen una responsabilidad social de estas características deben asumir los costos que esto significa, porque nosotros como llanquihuanos no estamos dispuestos a seguir asumiendo lo que por años hemos estado sufriendo”.