Una nueva exposición en el Museo Británico de Londres incluye piezas musicales grabadas por prisioneros de la dictadura chilena y que forman parte del proyecto Cantos Cautivos, encabezado por la investigadora Katia Chornik.
La iniciativa, desarrollada en un principio en conjunto con el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, preserva el repertorio de canciones que se cantaron, compusieron y escucharon en centros de detención y tortura, entre 1973 y 1990.
Ahora, algunas de las piezas recogidas por Cantos Cautivos forman parte de la exposición Me opongo, en la búsqueda de la disidencia, que el editor Ian Hislop presenta en el Museo Británico, desde la semana pasada y hasta el 20 de enero de 2019.
“En su búsqueda Hislop escogió cuidadosamente una gama de objetos intrigantes que exploran la idea de la disidencia, la subversión y la sátira. Es por ello que las piezas que se exhiben en la exposición van desde grafitis en un ladrillo babilónico a un billete de banco con palabras ocultas y groseras, desde satíricas marionetas turcas hasta un sombrero recientemente adquirido en una marcha de mujeres”, explica un comunicado de prensa.
Específicamente, la canción que forma parte de la muestra es “Doctorcitos”, del grupo Los de Chacabuco, que satiriza a los abogados y funcionarios de gobierno.
Según Tom Huckenhull, curador de la exposición, “el objetivo es una muestra que celebra la capacidad humana para hacer frente a la opresión, la persecución y las circunstancias que están fuera de nuestro control. Muchos de los objetos se refieren a actos de desobediencia creativa, en los que el creador ha encontrado la capacidad de reírse ante la autoridad, incluso desde los lugares más oscuros de todo el mundo”.
“Esto incluye monedas aparentemente desfiguradas por un prisionero político del régimen de Pinochet en Chile. Por lo tanto, cuando surgió la oportunidad de tener cabinas de sonido en la exposición, elegimos incluir la melodía subversiva ‘Doctorcitos’, interpretada por sobrevivientes del campo de concentración de Chacabuco”, concluyó.