Raúl Schüler es el nombre del empresario que tenía en su poder once estatuas robadas desde el Cementerio General, el Cerro Santa Lucía, y una iglesia de San Francisco de Mostazal, entre otros recintos.

Por lo mismo, y según informó La Tercera, el fiscal de Alta Complejidad de O’Higgins, Sergio Moya, formalizará a Schüler por receptación reiterada, infracción a la ley de Monumentos Nacionales y  por infracción a la ley de control de armas y municiones.

El persecutor sostuvo que se pedirá la audiencia de formalización en el juzgado de Garantía de Graneros y, hasta ahora, se imputará solo a Schüler.

Dentro de las estatuas encontradas por la Policía de Investigaciones, se encontró  la escultura “La República”, que fue robada por desconocidos en el año 2003 desde la plaza Rubén Darío de Playa Ancha.

Además, el empresario guardaba en su hacienda de San Francisco de Mostazal dos cofres desaparecidos de la iglesia de la localidad y armamento de guerra utilizado en la Guerra del Pacífico.

Según detalló el subprefecto Pablo Ibarra, jefe de la Brigada Investigadora de Delitos Contra el Medio Ambiente y Patrimonio Cultural (Bidema) Metropolitana, el operativo se desarrolló luego de que fuera publicaba una fotografía de una figura de hierro en un diario local, y luego de múltiples pericias para encontrar su ubicación, se determinó que la figura, desaparecida desde 2003, estaba en el predio de Raúl Schüler.

Las especies robadas tendrían un valor de entre 150 a 350 millones de pesos cada una, y pese a que las obras fueron recuperadas, no se registraron detenidos.