Según la expresión, “todos los caminos conducen a Roma”. Al menos ése es el sendero que Alfonso Cuarón ha tomado hacia el éxito. Su última película fue una de las grandes ganadoras de los Globos de Oro, el domingo en Los Angeles. El mexicano recibió dos estatuillas, al Mejor Director y a la Mejor película por esta cinta, la más personal de toda su carrera cinematográfica.
Roma narra la cotidianidad de una familia acomodada en el México de los años 70, cuya vida gira en torno a una mujer: la abnegada Cleo, una de las dos sirvientas que se ocupa de la casa y del cuidado de los niños.
La cinta está inspirada en la infancia de Cuarón y de la mujer que lo crió, Liboria Rodríguez, cuyo papel fue interpretado por la increíble Yalitza Aparicio, una maestra de origen indígena convertida en actriz gracias a esta película.
Para Cuarón, Roma fue la ocasión de hablar de su país natal y de un mundo que jamás se había retratado con belleza en el cine: el de las empleadas domésticas. Pero además, la cinta es una oda al cine y a una estética muy particular que recuerda a la época dorada del cine mexicano. Filmada en blanco y negro, Roma está por supuesto hablada en español y lengua indígena.
“El cine construye puentes a otras culturas, y mientras cruzamos estos puentes, esta experiencia y estas nuevas formas, necesitamos entender que aunque parezcan extrañas, son familiares. Necesitamos entender que tenemos mucho en común”, dijo el mexicano en la ceremonia del domingo.
Bohemian Rhapsody
La gran sorpresa de la noche fue el biopic sobre el legendario Freddy Mercury y su banda Queen. La película se llevó la recompensa al mejor drama, el galardón más importante de la noche, y mejor actor dramático, para Rami Malek.
Por su parte, Nace una estrella, el drama musical dirigido y protagonizado por Bradley Cooper junto a Lady Gaga, y favorito a mejor drama, se quedó con un único trofeo por mejor canción original.
Green Book, que recrea un viaje al sur de Estados Unidos en tiempos de segregación en la década de 1960 del pianista negro de música clásica Don Shirley (Mahershala Ali) y su chofer Tony Vallelonga (Viggo Mortensen), fue la gran ganadora, con tres estatuillas: mejor guion, mejor comedia y mejor actor de reparto para Ali.
El actor Christian Bale ganó la estatuilla a la mejor interpretación masculina y agradeció a Satanás por la “inspiración” para interpretar al exvicepresidente Dick Cheney en Vice.
Por su parte, Regina King, por su papel en If Beale Street Could Talk, que sigue a una joven afroamericana que, con el apoyo de su familia, busca limpiar el nombre de su esposo acusado erróneamente y probar su inocencia antes del nacimiento de su hijo.
Según la expresión, “todos los caminos conducen a Roma”. Al menos ése es el sendero que Alfonso Cuarón ha tomado hacia el éxito. Su última película fue una de las grandes ganadoras de los Globos de Oro, el domingo en Los Angeles. El mexicano recibió dos estatuillas, al Mejor Director y a la Mejor película por esta cinta, la más personal de toda su carrera cinematográfica.
Roma narra la cotidianidad de una familia acomodada en el México de los años 70, cuya vida gira en torno a una mujer: la abnegada Cleo, una de las dos sirvientas que se ocupa de la casa y del cuidado de los niños.
La cinta está inspirada en la infancia de Cuarón y de la mujer que lo crió, Liboria Rodríguez, cuyo papel fue interpretado por la increíble Yalitza Aparicio, una maestra de origen indígena convertida en actriz gracias a esta película.
Para Cuarón, Roma fue la ocasión de hablar de su país natal y de un mundo que jamás se había retratado con belleza en el cine: el de las empleadas domésticas. Pero además, la cinta es una oda al cine y a una estética muy particular que recuerda a la época dorada del cine mexicano. Filmada en blanco y negro, Roma está por supuesto hablada en español y lengua indígena.
“El cine construye puentes a otras culturas, y mientras cruzamos estos puentes, esta experiencia y estas nuevas formas, necesitamos entender que aunque parezcan extrañas, son familiares. Necesitamos entender que tenemos mucho en común”, dijo el mexicano en la ceremonia del domingo.
Bohemian Rhapsody
La gran sorpresa de la noche fue el biopic sobre el legendario Freddy Mercury y su banda Queen. La película se llevó la recompensa al mejor drama, el galardón más importante de la noche, y mejor actor dramático, para Rami Malek.
Por su parte, Nace una estrella, el drama musical dirigido y protagonizado por Bradley Cooper junto a Lady Gaga, y favorito a mejor drama, se quedó con un único trofeo por mejor canción original.
Green Book, que recrea un viaje al sur de Estados Unidos en tiempos de segregación en la década de 1960 del pianista negro de música clásica Don Shirley (Mahershala Ali) y su chofer Tony Vallelonga (Viggo Mortensen), fue la gran ganadora, con tres estatuillas: mejor guion, mejor comedia y mejor actor de reparto para Ali.
El actor Christian Bale ganó la estatuilla a la mejor interpretación masculina y agradeció a Satanás por la “inspiración” para interpretar al exvicepresidente Dick Cheney en Vice.
Por su parte, Regina King, por su papel en If Beale Street Could Talk, que sigue a una joven afroamericana que, con el apoyo de su familia, busca limpiar el nombre de su esposo acusado erróneamente y probar su inocencia antes del nacimiento de su hijo.
Según la expresión, “todos los caminos conducen a Roma”. Al menos ése es el sendero que Alfonso Cuarón ha tomado hacia el éxito. Su última película fue una de las grandes ganadoras de los Globos de Oro, el domingo en Los Angeles. El mexicano recibió dos estatuillas, al Mejor Director y a la Mejor película por esta cinta, la más personal de toda su carrera cinematográfica.
Roma narra la cotidianidad de una familia acomodada en el México de los años 70, cuya vida gira en torno a una mujer: la abnegada Cleo, una de las dos sirvientas que se ocupa de la casa y del cuidado de los niños.
La cinta está inspirada en la infancia de Cuarón y de la mujer que lo crió, Liboria Rodríguez, cuyo papel fue interpretado por la increíble Yalitza Aparicio, una maestra de origen indígena convertida en actriz gracias a esta película.
Para Cuarón, Roma fue la ocasión de hablar de su país natal y de un mundo que jamás se había retratado con belleza en el cine: el de las empleadas domésticas. Pero además, la cinta es una oda al cine y a una estética muy particular que recuerda a la época dorada del cine mexicano. Filmada en blanco y negro, Roma está por supuesto hablada en español y lengua indígena.
“El cine construye puentes a otras culturas, y mientras cruzamos estos puentes, esta experiencia y estas nuevas formas, necesitamos entender que aunque parezcan extrañas, son familiares. Necesitamos entender que tenemos mucho en común”, dijo el mexicano en la ceremonia del domingo.
Bohemian Rhapsody
La gran sorpresa de la noche fue el biopic sobre el legendario Freddy Mercury y su banda Queen. La película se llevó la recompensa al mejor drama, el galardón más importante de la noche, y mejor actor dramático, para Rami Malek.
Por su parte, Nace una estrella, el drama musical dirigido y protagonizado por Bradley Cooper junto a Lady Gaga, y favorito a mejor drama, se quedó con un único trofeo por mejor canción original.
Green Book, que recrea un viaje al sur de Estados Unidos en tiempos de segregación en la década de 1960 del pianista negro de música clásica Don Shirley (Mahershala Ali) y su chofer Tony Vallelonga (Viggo Mortensen), fue la gran ganadora, con tres estatuillas: mejor guion, mejor comedia y mejor actor de reparto para Ali.
El actor Christian Bale ganó la estatuilla a la mejor interpretación masculina y agradeció a Satanás por la “inspiración” para interpretar al exvicepresidente Dick Cheney en Vice.
Por su parte, Regina King, por su papel en If Beale Street Could Talk, que sigue a una joven afroamericana que, con el apoyo de su familia, busca limpiar el nombre de su esposo acusado erróneamente y probar su inocencia antes del nacimiento de su hijo.
