Este lunes siete de enero, la Corte de Apelaciones de Valparaíso admitió un recurso de protección, presentado por la Asociación Duna Viva, que exigía la paralización de las obras de la empresa Reconsa en la avenida Cornisa, el área del campo dunar que le pertenece a la ciudad de Concón.
El informe presentado por el representante de Duna Viva, Gabriel Muñoz, recalca la calidad de santuario natural del Campo Dunar Punta de Concón -según decreto supremo N°45 del 2012-, así como la falta de un estudio de impacto ambiental por parte de Reconsa y la ilegitimidad del permiso de edificación emitido por la Dirección de Obras Municipales de Viña del Mar en el 2017.
Muñoz explicó a Radio y Diario Universidad de Chile que con este ya son dos los recursos de protección aprobados a la asociación Duna Viva. El primero, de noviembre del 2018, era en contra de la empresa Vimac, responsable de una construcción de dos torres en parte de las casi tres hectáreas que componen el santuario dunar perteneciente a Viña del Mar.
“Con Vimac, le hicieron un corte a la duna, sacaron toneladas de arena geológica milenaria. No sabemos dónde está, y ese corte es como de 20 metros, es un cerro cortado por la mitad, pero no es cualquier cerro, es la duna de Concón. No hay un campo dunar en Chile igual que el de Concón”, enfatizó Muñoz sobre los daños ocasionados.
El recientemente admitido recurso de protección, sin embargo, va en contra de la empresa Reconsa, luego de que, gracias a diversas fotografías notariadas y adjuntas en el informe de Muñoz para la Corte de Valparaíso, se demostrara el movimiento de la arena producto de las retroexcavadoras y motoniveladoras ubicadas en la calle Bosque de Montemar y la avenida Cornisa.
Pese a la celebrada admisión del recurso de protección, Muñoz indicó que la Corte decidió no admitir la orden de no innovar y que, por tal motivo, de la misma forma que sucedió con la empresa Vimac, las construcciones siguen su curso.
La empresa Reconsa, en declaraciones para radio Biobío, se defendió asegurando que el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) no consideró necesario un estudio de impacto ambiental para la construcción de la obra. Sin embargo, para Muñoz, esta declaración correspondería al año 2017, cuando la Municipalidad de Concón no contaba con el Plan Regulador Comunal que amplió la protección de las dunas de 30 a 50 hectáreas.
“La declaración de pertinencia es para construir un bien raíz de no más de 800 personas, pero el proyecto que están construyendo es de 50 torres. Fueron y mostraron un proyecto chiquitito, pero no dijeron al Servicio de Evaluación Ambiental que el proyecto era de 50 torres, de miles y miles de personas, que implica la construcción completa del campo dunar”, explicó Muñoz sobre el proyecto que pretende construir Reconsa.
La importancia de los recursos de protección admitidos por la Corte de Apelaciones de Valparaíso, según Muñoz, recaería en que todas las autoridades medioambientales que habían aprobado la pertinencia de las construcciones de Reconsa, ahora tendrán que actualizar los informes emitidos.
Aunque el daño en las dunas provocado por Vimac será irreparable, el abogado señala que aún se puede preservar el área que Reconsa pretende vulnerar, ya que la arena de la zona aún no es removida en su totalidad.