Casandra fue, según la mitología griega, una princesa y sacerdotisa que pactó un encuentro carnal con el dios Apolo. A cambio, éste le concedió el don de la profecía. Tras rechazar el amor del dios, Apolo la maldijo: ya nadie creería en sus profecías. Tomando como punto de partida este personaje de la antigua Troya, el dramaturgo franco-uruguayo, Sergio Blanco (Tebas Land, La Ira de narciso) escribió el monólogo Kassandra que se presentará desde el 1 de agosto, en la Microsala del Centro Cultural Matucana 100.

El montaje, protagonizado por el actor Lucas Balmaceda (La noche obstinada, Los 80), está a cargo de la directora Soledad Gaspar, quién propone una Kassandra contemporánea, trans y prostituta. Una obra que, según la compañía, pone énfasis en medios sonoros y audiovisuales, y que “invitará al espectador a recorrer los laberintos de la marginalidad, como único testigo de la fatalidad que la mantiene viva”.

Para Blanco, la obra “es un unipersonal escrito en un inglés precario. El personaje es una migrante que vende productos de contrabando en un pub clandestino. La idea es presentar, a través de su narración, una crítica de la realidad actual: nuestras infortunadas Troyas, nuestros exilios inevitables, nuestros Aquiles de alta tecnología, nuestros Héctores martirizados, nuestras Helenas de lujo y nuestras barbaries”.

Este mismo equipo ( Balmaceda, Gaspar, De la Maza, Araya) prepara para el segundo semestre de 2019 La Ira de Narciso (también de Sergio Blanco). La obra, dirigida esta vez por Lucía de la Maza e interpretada por Freddy Araya, se presenta como la última parte de una trilogía basada en la mitología griega, que partió el año 2017 junto a Tebas Land.

La obra se presentará hasta el 18 de agosto, de miércoles a sábado a las 20:30 horas y domingos a las 19:30 horas. La entrada tiene un valor de $6.000 (general), $3.000 (estudiantes, tercera edad, miércoles y jueves popular).