Durante este lunes la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile publicó su octavo informe Covid-19 que da cuenta del análisis y proyección del brote del Coronavirus en el país. Asimismo los autores determinaron no seguir modelando con los datos que emanan del Minsal, por la confusión y poca rigurosidad que, según afirmaron, éstos representan, dejando de contribuir en intentos de predicción del desarrollo de la pandemia en Chile, hasta que no se tenga confianza en ellos.
Así consignó el documento redactado por los académicos Mauricio Canals, Andrea Canals y Cristóbal Cuadrado, afirmando que los datos aportados por la autoridad sanitaria del gobierno han provocado una confusión muy grande y hacen imposible toda modelación.
La metodología considerada para la elaboración de los informes utiliza datos recortados que, de no estar representando la realidad, no calibran la magnitud de la pandemia y disminuyen la capacidad de predicción de los modelos. Así lo explicó el académico de la ESP y coautor del documento, Mauricio Canals, en conversación con nuestro medio.
“Hoy día se acaba de informar que se van a agregar 31 mil casos que han ocurrido en todo el periodo y eso es terrible porque significa que todos los datos en los que se basan nuestros modelos, en realidad son datos que no son cien por ciento confiables. Afortunadamente nosotros hacíamos una corrección, un sub-reporte, que nos permitía evaluar un poco mejor la situación, pero si los datos no son los que representan la realidad, entonces estamos en un problema de tratar de predecir qué es lo que va a pasar en el futuro”.
Sin prejuicio de la rigurosidad del Departamento de Estadística e Información de Salud o del Departamento de Tecnología del Ministerio, señalaba Canals, las diferencias se producían cuando la información llegaba al público, en la medida que el ex ministro de salud Jaime Mañalich, realizaba cálculos que de alguna u otra manera, reducían las dimensiones del Covid-19.
“Lo que se hizo en el periodo anterior, en el periodo del ministro Mañalich, fue informar exclusivamente los PCR positivos y minimizar la cantidad de casos y fallecidos con cálculos que, yo no voy a decir que fue intencionalmente, sino que los cálculos que se hicieron minimizaban la magnitud de la pandemia. Actualmente se está intentando, aparentemente, de ponerse al día en ese aspecto para que se calibre adecuadamente la pandemia y con eso poder modelar y tener indicadores adecuados, para que cuando haya que relajar las intervenciones epidemiológicas, se haga sobre datos oportunos y fidedignos”, afirmó.
La octava publicación del informe epidemiológico imputa la inexactitud de la letalidad en los catastros del Minsal, cuya imprecisión representa el dato “duro” que se refrenda por exámenes y certificados de defunción.
“En el último tiempo hemos visto una impresionante variación con cambios a posteriori, cambios de metodología y saltos impresionantes en el número de fallecidos, como un día en que se agregaron 653 fallecidos. Esto se ha agravado aún más al conocerse un doble registro de casos, el oficial con alrededor de 3.000 casos y otro para OMS que incluye PCR (+) y probables, de más de 5.000. No significa esto que la metodología sea incorrecta. Un registro se refiere a PCR (+) y el otro a PCR (+) más casos probables, sin embargo, significa que la información es incorrecta”, señalan en el documento.
También puntualizaron el eje de los casos activos, que son la fracción de mayor importancia desde el punto de vista epidémico en cuanto cursan la enfermedad y son contagiosos para la población.
“Los infectados activos corresponden a los casos nuevos reclutados en las últimas dos semanas menos aquellos que han fallecido. Si cada caso nuevo permanece como caso activo entre 10 y 14 días, entonces se debe esperar que exista una razón 1/10 a 1/14 entre casos nuevos y casos activos” explican.
“Es decir, si se reportan 5.000 casos en un día, se espera que los casos activos sean al menos 50.000. Sin embargo aunque el MINSAL reporta del orden de 5.000 a 6.000 casos/día, se reportan alrededor de 25.000 casos activos. Se fundamenta esta diferencia en que el Departamento de Epidemiología calcula sobre la base de los primeros síntomas y no sobre PCR. Esto implica que los 25.000 (aproximadamente) de diferencia son casos que al momento del reporte dejaron de serlo, lo que refuerza la idea anterior. Esto es impresentable, ya que los modelos se basan sobre casos reportados y entonces uno se pregunta ¿Qué se está modelando realmente?”.
Evaluación del virus
Respecto al análisis del virus, que hoy superó los 180 mil contagios en el país, en el orden que se registran 5 mil nuevos casos a diario, el académico de la ESP, sujeto a las imprecisiones de los datos recortados que se utilizan en la modelación con la cual se calibra la magnitud de la pandemia, se aventuró a afirmar que, al menos en la RM, se ha alcanzado el peak.
“En cuanto a los contagios, el modelo determinístico registró que el peak habría sido el domingo y que debiera mantenerse. Los otros modelos que son más creíbles, que es el estocástico, dice que puede presentarse entre el 6 hasta el 23 de junio, podría existir una meseta de situación peak que podría demorar todavía una semana más aproximadamente para después decaer. Sin embargo mi impresión es que estamos viviendo, al menos en Santiago, el impacto mayor de la epidemia”, sostuvo Canals.
En ese sentido el experto señaló que es imperativo el disminuir la carga de infectados activos y del número reproductivo infectivo, que miden la magnitud de la pandemia, liberar en alguna medida la capacidad del sistema de salud con mayor proporción de UCIS disponibles para luego reforzar la trazabilidad del virus y la capacidad de aislamiento de los individuos que son trazados.
Hibernación
El recrudecimiento de la pandemia ha llevado a extremar las medidas que vayan en post de la mitigación de la curva de contagios del virus. Así es como Espacio Público propuso someter a toda la RM en un estado de hibernación, con la finalidad de disminuir casi completamente el desplazamiento de personas en la vía pública. Una alternativa que según el académico de la Universidad de Chile, es necesario considerar.
“La hibernación a la que se refiere Espacio Público es una de las medidas que se pueden tomar y se refiere a disminuir realmente al máximo la capacidad de movilidad de la población y en eso uno siempre tiene que estar de acuerdo, porque en este instante, que a nuestro juicio es el peak epidémico, hay que evitar a toda costa el colapso que ya se está produciendo en las UCIS. De alguna manera hay que reducir el número de reproductivo efectivo a valores menores que uno, mientras este número no esté bajo uno, la carga de infectados que van a estar recibiendo los servicios de salud no van a bajar”.