Para muchos y muchas el término maritorio es algo nuevo o desconocido. Se ha escuchado más frecuentemente en nuevas propuestas legislativas, pero la verdad es que es un concepto que nace en los años 70 y que ha tomado relevancia los últimos años.
Uno de los investigadores que ha trabajado este concepto es Ricardo Álvarez, investigador principal del Núcleo Milenio Océano, Patrimonio y Cultura (OHC) quien se presentará en Puerto de Ideas Biobío 2022. Al preguntar qué es maritorio y por qué puede ser importante conocer este término, el académico destaca que el concepto busca visibilizar la dimensión de habitar el mar. No es menor recordar, por ejemplo, que se nos enseña que Chile posee algo más de 6 mil kilómetros de largo. Si se considera la Patagonia litoral e insular la cifra adquiere dimensiones enormes: más de 100 mil kilómetros, que son caminados por sus habitantes en marea baja, o navegados y buceados cuando sube la marea”. A lo que hay que sumar que Chile cuenta con más de 40 mil islas, lo que lo sitúa entre las primeras cinco naciones insulares del mundo.
Álvarez, quien además es Profesor asociado de la Escuela de Arqueología de la Universidad Austral de Chile e investigador del centro de investigación ARQMAR destaca que “la invisibilidad del maritorio a nivel país, ha provocado que de forma crónica el entorno marino-costero e insular sea abordado de forma fragmentaria y simplificada, o que las especies y espacios hayan sido demarcados simplemente como cosas explotables, que pueden ser sacados o alterados sin que ello provoque alguna modificación en este entorno”, de esta forma establece que el concepto de maritorio entrelaza el mar con la tierra a través de ensamblajes entre vidas y múltiples elementos como el clima o las corrientes. “Esta explicitación de entrelazamientos es importante porque nos obliga a considerar que todos estos elementos son interdependientes y requieren de un cambio profundo en nuestra manera de ver el mundo”.
El maritorio implica abrirse a otras realidades y visiones, donde por ejemplo “una mariscadura comunitaria, provee de contribuciones recíprocas hacia la naturaleza a la vez que satisface necesidades humanas universales. La posibilidad de visibilizar esto es sumamente difícil desde la distancia de la hegemonía del ‘territorio’. Es por eso por lo que incluir al maritorio en nuestro lenguaje es un ejercicio que implica avanzar hacia nuevas formas de relacionamiento con el mundo”, concluye el experto.
Cabe mencionar que Ricardo Álvarez junto a otros investigadores publicaron el 2019 el artículo: “Nota breve sobre el concepto de maritorio y su relevancia para los estudios isleños contemporáneos”. Este artículo busca dar cuenta de la realidad de Chiloé, la que podría extrapolarse al resto del país. En el texto se destaca la situación de sobreexplotación de recursos en Chile, ya sea por la desvalorización de sus habitantes y sus espacios, el trabajo por industrias extractivas, por la especulación inmobiliaria o por la degradación medioambiental. El texto entrega, además, datos sobre las tasas de pobreza litoral-insular con mayor concentración en los Pueblos Originarios y la ruralidad, lo que contribuye a la desigualdad de sus habitantes.