Luego de anunciar que la visita del presidente Gabriel Boric a la Araucanía se realizará este jueves y viernes, la ministra del Interior, Carolina Tohá, desestimó el llamado que hizo la Coordinadora Arauco Malleco para impedir que se materialice su agenda.
Al respecto, Tohá indicó que “muy extrañamente hay grupos que dicen defender los derechos del pueblo mapuche, pero a los pasos que da el Estado para hacerse cargo de esa deuda, en lugar de verlo con esperanza se oponen y parecieran enojarse ante la disposición de ir más adelante y de hacerse cargo de que es necesario avanzar”.
Además, dijo que a quienes “le importa la comunidad y el pueblo mapuche, ven con esperanza que el Presidente vaya” a la región, destacando que con ellos se buscará avanzar en el sentido de ir superando las demandas que hoy día persisten.
Respecto a la seguridad del mandatario, Tohá indicó que “está considerada, ha estado muy presente en la planificación. Pero queremos decir que la manera que se planifica cuando el Presidente de la República se desplaza por el territorio, no lo hace en virtud de amenazas, lo hace en virtud de su rol de jefe de Estado, de autoridad de todo el territorio de la República”.
Agenda de seguridad
Consultada por las conversaciones para avanzar en materia de seguridad ciudadana, la ministra del Interior explicó que va en dos carriles paralelos. Por un lado está la actualización de la Política Nacional de Seguridad que data del gobierno de Ricardo Lagos y que hasta ahora no se había actualizado.
“Esa política se está coordinando con la presencia de todos los órganos del Estado que tienen un rol relevante en materia de seguridad”, indicó Tohá, entre quienes se cuenta al Poder Judicial.
Por otra parte, está la convocatoria amplia a todos los sectores que incluye a parlamentarios, alcaldes, gobernadores regionales, entre otros actores, para generar un programa de acción más contingente para enfrentar la delincuencia y el crimen organizado que se instaló en el país.
“En paralelo, tenemos este compromiso transversal que es una agenda de acciones más inmediatas que se va a traducir en una agenda legislativa y en decisiones de política pública para implementar poniendo foco ahí donde están las urgencias y donde están los acuerdos políticos transversales. Ambas dimensiones están trabajando de manera simultánea”, subrayó.
La ministra puntualizó que el fenómeno del crimen organizado no es exclusivo de Chile, sino que está afectando a varias naciones como consecuencia del cierre de fronteras que significó la emergencia sanitaria que provocó el Covid 19 y que permitió el tráfico de todo tipo, incluyendo a bandas organizadas, personas y armas, explicó.
Por eso dijo que resulta relevante la destinación extraordinaria de recursos para la compra de nuevos vehículos para Carabineros y el reforzamiento de los recursos para el 2023 que permitan renovar todo el parque y que incluye automóviles especiales y otros blindados para aumentar la eficacia de la labor policial.
“El Estado está asumiendo que se debe fortalecer”, sostuvo la jefa de gabinete, precisando que el incremento de las capacidades policiales “significa que nuestras instituciones tienen que ser profesionalmente más solventes, deben tener más herramientas como por ejemplo vehículos, más protecciones, más tecnología, mejor manejo de la información, mejor manejo entre ellas”.
Por eso, insistió en que en general el Estado y las policías “deben ponerse a la altura. Y las políticas de seguridad del gobierno del presidente Boric apuntan a eso. A eso apuntan las reformas de las policías, a eso va la ley de inteligencia, a eso va el presupuesto de la República, la política contra el crimen organizado, a eso que por mucho tiempo se rezagó”.