A días de que comience la discusión de lo que serán las primeras enmiendas al anteproyecto de la Comisión Experta, consejeros del Partido Republicano y la UDI están evaluando modificar las normas referidas a la libertad sindical incorporadas al texto constitucional.
Según contempla el anteproyecto “la constitución garantiza el derecho a la huelga de los trabajadores para la defensa de sus intereses laborales. Este derecho será ejercido con las limitaciones fijadas por una ley de quorum calificado”; sin embargo, este sector buscaría limitar este derecho solamente a las negociaciones colectivas.
El consejero republicano Jorge Ossandón dijo que “a primera vista nos parece inadecuada la separación entre negociación colectiva y huelga para el sector privado, y que al mismo tiempo se promueva una constitucionalización de la paralización de los funcionarios públicos que cumplen un rol fundamental al servicio de todos los chilenos, especialmente los más vulnerables”, consignó a La Tercera.
En conversación con Radio Universidad de Chile, el doctor en Derecho Laboral y académico de la Universidad Diego Portales, José Luis Ugarte, calificó este planteamiento como “inaceptable”, puesto que –a su juicio- con esta medida “no se avanza, sino que se retrocede”.
“La propuesta general de libertad sindical está en los mínimos de derecho comparado y de los convenios de libertad sindical de la OIT. Por lo tanto, la propuesta está ajustada al estándar de derecho internacional y en el caso particular de la huelga esta propuesta de vincularla a la negociación colectiva significaría un retroceso, porque el estado actual de las cosas, con la actual constitución, la jurisprudencia y la doctrina más relevante en derecho ha sostenido que la huelga es un derecho autónomo, que puede ejercerse en la negociación colectiva, pero también fuera. Entonces, esta propuesta retrocede en relación a lo que ya tenemos”, expresó.
Además, el abogado apuntó que “incluso uno podría decir que en este punto a los trabajadores racionalmente les convendría rechazar, porque ellos y los que están organizados en sindicatos quedan peor que lo que están hoy día” y añadió que esta iniciativa “se saltaría el Congreso, porque para vincular la huelga con la negociación colectiva deberían dictar una ley para modificar el Código del Trabajo y en fondo aquí se lo saltan por la vía del proceso constituyente”.
Ugarte mencionó que el efecto práctico que tendría esta medida es que, por ejemplo, “trabajadores que tuvieran problemas de seguridad e higiene, como vimos en la pandemia, no podrían suspender sus funciones. Un ejemplo histórico para que quede claro, si los trabajadores de la mina que quedaron atrapados (en 2010) hubieran hecho una huelga un día antes de quedar atrapados, de acuerdo a esta propuesta, esa huelga sería ilícita porque no estarían negociando colectivamente”.
Por su parte, el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores, David Acuña, manifestó a nuestro medio que “nosotros creemos que la libertad sindical y sobre todo el trabajo decente es fundamental para la construcción de una nueva constitución. Esto lo hemos traído de un proceso de conversación, realizamos un congreso como CUT, lo cual nos llevó a tomar esta decisión de volver a participar en este proceso constituyente. Entonces, ahí el derecho a huelga para nosotros va más allá de lo monetario, porque es mejorar las condiciones de trabajo, de evitar la normalización que existe hoy día con la alta precarización laboral que hay”.
En esa línea, puntualizó que “limitar el derecho a huelga es ir en contra los principios que también determinan la Organización Internacional del Trabajo (OIT). La huelga es un proceso que es democrático, que nace de la voluntad de nuestras bases para establecer justicia social y una mejor distribución de la riqueza, esto a través también de la negociación colectiva. Entonces, el hecho de que los republicanos anuncien que va a rechazar una norma que fue votada por todos los sectores, por la Comisión Experta y cuenta con el apoyo de dos Iniciativas Populares de Norma con más de 23 mil apoyos, solo muestra lo alejados que están de la realidad de la ciudadanía y esto no es transable para la CUT”.
“Para nosotros la Constitución no puede traer retrocesos de lo que hemos construido y logrado hoy día en nuestro país. La huelga es una herramienta que también nivela las relaciones laborales y es la última opción de la organización sindical cuando ya se acaba el diálogo, recién ahí llegamos al conflicto, que insisto es democrático. Tenemos que contar con estos tres principios: Libertad sindical, negociación colectiva y el derecho a huelga”, reafirmó el dirigente.
A días de que comience la discusión de lo que serán las primeras enmiendas al anteproyecto de la Comisión Experta, consejeros del Partido Republicano y la UDI están evaluando modificar las normas referidas a la libertad sindical incorporadas al texto constitucional.
Según contempla el anteproyecto “la constitución garantiza el derecho a la huelga de los trabajadores para la defensa de sus intereses laborales. Este derecho será ejercido con las limitaciones fijadas por una ley de quorum calificado”; sin embargo, este sector buscaría limitar este derecho solamente a las negociaciones colectivas.
El consejero republicano Jorge Ossandón dijo que “a primera vista nos parece inadecuada la separación entre negociación colectiva y huelga para el sector privado, y que al mismo tiempo se promueva una constitucionalización de la paralización de los funcionarios públicos que cumplen un rol fundamental al servicio de todos los chilenos, especialmente los más vulnerables”, consignó a La Tercera.
En conversación con Radio Universidad de Chile, el doctor en Derecho Laboral y académico de la Universidad Diego Portales, José Luis Ugarte, calificó este planteamiento como “inaceptable”, puesto que –a su juicio- con esta medida “no se avanza, sino que se retrocede”.
“La propuesta general de libertad sindical está en los mínimos de derecho comparado y de los convenios de libertad sindical de la OIT. Por lo tanto, la propuesta está ajustada al estándar de derecho internacional y en el caso particular de la huelga esta propuesta de vincularla a la negociación colectiva significaría un retroceso, porque el estado actual de las cosas, con la actual constitución, la jurisprudencia y la doctrina más relevante en derecho ha sostenido que la huelga es un derecho autónomo, que puede ejercerse en la negociación colectiva, pero también fuera. Entonces, esta propuesta retrocede en relación a lo que ya tenemos”, expresó.
Además, el abogado apuntó que “incluso uno podría decir que en este punto a los trabajadores racionalmente les convendría rechazar, porque ellos y los que están organizados en sindicatos quedan peor que lo que están hoy día” y añadió que esta iniciativa “se saltaría el Congreso, porque para vincular la huelga con la negociación colectiva deberían dictar una ley para modificar el Código del Trabajo y en fondo aquí se lo saltan por la vía del proceso constituyente”.
Ugarte mencionó que el efecto práctico que tendría esta medida es que, por ejemplo, “trabajadores que tuvieran problemas de seguridad e higiene, como vimos en la pandemia, no podrían suspender sus funciones. Un ejemplo histórico para que quede claro, si los trabajadores de la mina que quedaron atrapados (en 2010) hubieran hecho una huelga un día antes de quedar atrapados, de acuerdo a esta propuesta, esa huelga sería ilícita porque no estarían negociando colectivamente”.
Por su parte, el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores, David Acuña, manifestó a nuestro medio que “nosotros creemos que la libertad sindical y sobre todo el trabajo decente es fundamental para la construcción de una nueva constitución. Esto lo hemos traído de un proceso de conversación, realizamos un congreso como CUT, lo cual nos llevó a tomar esta decisión de volver a participar en este proceso constituyente. Entonces, ahí el derecho a huelga para nosotros va más allá de lo monetario, porque es mejorar las condiciones de trabajo, de evitar la normalización que existe hoy día con la alta precarización laboral que hay”.
En esa línea, puntualizó que “limitar el derecho a huelga es ir en contra los principios que también determinan la Organización Internacional del Trabajo (OIT). La huelga es un proceso que es democrático, que nace de la voluntad de nuestras bases para establecer justicia social y una mejor distribución de la riqueza, esto a través también de la negociación colectiva. Entonces, el hecho de que los republicanos anuncien que va a rechazar una norma que fue votada por todos los sectores, por la Comisión Experta y cuenta con el apoyo de dos Iniciativas Populares de Norma con más de 23 mil apoyos, solo muestra lo alejados que están de la realidad de la ciudadanía y esto no es transable para la CUT”.
“Para nosotros la Constitución no puede traer retrocesos de lo que hemos construido y logrado hoy día en nuestro país. La huelga es una herramienta que también nivela las relaciones laborales y es la última opción de la organización sindical cuando ya se acaba el diálogo, recién ahí llegamos al conflicto, que insisto es democrático. Tenemos que contar con estos tres principios: Libertad sindical, negociación colectiva y el derecho a huelga”, reafirmó el dirigente.
A días de que comience la discusión de lo que serán las primeras enmiendas al anteproyecto de la Comisión Experta, consejeros del Partido Republicano y la UDI están evaluando modificar las normas referidas a la libertad sindical incorporadas al texto constitucional.
Según contempla el anteproyecto “la constitución garantiza el derecho a la huelga de los trabajadores para la defensa de sus intereses laborales. Este derecho será ejercido con las limitaciones fijadas por una ley de quorum calificado”; sin embargo, este sector buscaría limitar este derecho solamente a las negociaciones colectivas.
El consejero republicano Jorge Ossandón dijo que “a primera vista nos parece inadecuada la separación entre negociación colectiva y huelga para el sector privado, y que al mismo tiempo se promueva una constitucionalización de la paralización de los funcionarios públicos que cumplen un rol fundamental al servicio de todos los chilenos, especialmente los más vulnerables”, consignó a La Tercera.
En conversación con Radio Universidad de Chile, el doctor en Derecho Laboral y académico de la Universidad Diego Portales, José Luis Ugarte, calificó este planteamiento como “inaceptable”, puesto que –a su juicio- con esta medida “no se avanza, sino que se retrocede”.
“La propuesta general de libertad sindical está en los mínimos de derecho comparado y de los convenios de libertad sindical de la OIT. Por lo tanto, la propuesta está ajustada al estándar de derecho internacional y en el caso particular de la huelga esta propuesta de vincularla a la negociación colectiva significaría un retroceso, porque el estado actual de las cosas, con la actual constitución, la jurisprudencia y la doctrina más relevante en derecho ha sostenido que la huelga es un derecho autónomo, que puede ejercerse en la negociación colectiva, pero también fuera. Entonces, esta propuesta retrocede en relación a lo que ya tenemos”, expresó.
Además, el abogado apuntó que “incluso uno podría decir que en este punto a los trabajadores racionalmente les convendría rechazar, porque ellos y los que están organizados en sindicatos quedan peor que lo que están hoy día” y añadió que esta iniciativa “se saltaría el Congreso, porque para vincular la huelga con la negociación colectiva deberían dictar una ley para modificar el Código del Trabajo y en fondo aquí se lo saltan por la vía del proceso constituyente”.
Ugarte mencionó que el efecto práctico que tendría esta medida es que, por ejemplo, “trabajadores que tuvieran problemas de seguridad e higiene, como vimos en la pandemia, no podrían suspender sus funciones. Un ejemplo histórico para que quede claro, si los trabajadores de la mina que quedaron atrapados (en 2010) hubieran hecho una huelga un día antes de quedar atrapados, de acuerdo a esta propuesta, esa huelga sería ilícita porque no estarían negociando colectivamente”.
Por su parte, el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores, David Acuña, manifestó a nuestro medio que “nosotros creemos que la libertad sindical y sobre todo el trabajo decente es fundamental para la construcción de una nueva constitución. Esto lo hemos traído de un proceso de conversación, realizamos un congreso como CUT, lo cual nos llevó a tomar esta decisión de volver a participar en este proceso constituyente. Entonces, ahí el derecho a huelga para nosotros va más allá de lo monetario, porque es mejorar las condiciones de trabajo, de evitar la normalización que existe hoy día con la alta precarización laboral que hay”.
En esa línea, puntualizó que “limitar el derecho a huelga es ir en contra los principios que también determinan la Organización Internacional del Trabajo (OIT). La huelga es un proceso que es democrático, que nace de la voluntad de nuestras bases para establecer justicia social y una mejor distribución de la riqueza, esto a través también de la negociación colectiva. Entonces, el hecho de que los republicanos anuncien que va a rechazar una norma que fue votada por todos los sectores, por la Comisión Experta y cuenta con el apoyo de dos Iniciativas Populares de Norma con más de 23 mil apoyos, solo muestra lo alejados que están de la realidad de la ciudadanía y esto no es transable para la CUT”.
“Para nosotros la Constitución no puede traer retrocesos de lo que hemos construido y logrado hoy día en nuestro país. La huelga es una herramienta que también nivela las relaciones laborales y es la última opción de la organización sindical cuando ya se acaba el diálogo, recién ahí llegamos al conflicto, que insisto es democrático. Tenemos que contar con estos tres principios: Libertad sindical, negociación colectiva y el derecho a huelga”, reafirmó el dirigente.
