A través de una declaración pública los becarios y ex becarios de la Fundación Ford expresaron su respaldo al movimiento estudiantil y rechazaron los actos de violencia de la fuerza policial para reprimir las manifestaciones.
El texto indica que  creen “firmemente en que es necesario reformar el sistema educativo, garantizando el acceso libre y equitativo a una educación pública digna, no sexista, gratuita, multicultural y democrática”.

Los becarios de la Fundación Ford subrayaron que, en la actualidad, el sistema obliga a las entidades a competir en diferencia de condiciones con el sector privado y que esto actúa en desmedro de la calidad de la educación a nivel secundario, pero especialmente, universitario.

“La educación pública no puede hacer frente a la competencia desleal que significa la creación de instituciones de educación, entendiendo que hoy por hoy un privado cualquiera, con sólo una edificación con condiciones mínimas, puede abrir un colegio o universidad como quien abre un kiosko de maní, mientras que a las instituciones públicas se las somete a rígidas normativas y limitaciones. Además, mientras las universidades públicas invierten en formación docente e investigación, las universidades privadas solo usufructúan de ésta; y mientras los colegios privados seleccionan al alumnado, los públicos atienden al más vulnerable e incluso rechazado por los privados por su bajo rendimiento. Esta competencia desleal contribuye a potenciar el mito de las virtudes de la administración privada de un bien público financiado con los recurso de todos/as los chilenos”, señala el documento.

Finalmente, los becarios rechazaron la propuesta que entregó el Gobierno en la materia por considerar que “perpetúa la desigualdad y el lucro en la educación” y la violencia ejercida en contra de los estudiantes que buscan visibilizar esta situación.