El Presidente Sebastián Piñera dio a conocer la Estrategia Nacional de Energía, la cual busca, ente otras cosas, disminuir el consumo energético en un 12 por ciento para el año 2020.
El Mandatario puso énfasis en el desarrollo de la energía hidroeléctrica en la región de Aysén y una rápida inserción de Energías Renovables No Convencionales (ERNC)
Ello, debido a la necesidad de duplicar la matriz energética cada diez años ya que, a juicio del Gobierno, la demanda crece entre un seis y un siete por ciento anual. En este sentido, Piñera puso énfasis en que si el país no gana la batalla por tener energía limpia y segura, “no seremos desarrollados”, afirmó.
El Jefe de Estado señaló que el plan busca, además, crear una cultura de eficiencia energética y anunció que se entregará un sello a las empresas que contribuyan a un uso responsable de este recurso.
Otro de los puntos de la propuesta es la construcción de una carretera energética, la que trasmitirá la energía a todos los rincones del país. La planificación de esta política gubernamental, precisó el Jefe de Estado, estará a cargo de una comisión interministerial.
Sin embargo, el anuncio del Gobierno no fue bien recibido por la directora de Chile Sustentable, Sara Larraín, quien señaló que la estrategia energética no contiene nada nuevo de lo que ya se había anunciado.
“Lo lamentamos porque creemos que es absolutamente inaceptable que el Presidente no lograra generar un documento orientador de la política energética. No logró anunciar un plan estratégico y aún no logra presentarle al país una política concreta, por lo tanto, seguimos con puras vaguedades y aprobando todas las iniciativas del sector privado sin ninguna coherencia con los desafíos que presenta la política energética a nivel nacional”, sostuvo la ambientalista.
Por su parte, Luis Mariano Rendón criticó lo poco claro del discurso en torno a fomentar las Energías Renovables No Convencionales y el desestimar una demanda primordial del movimiento ambientalista.
“Nos preocupa muchísimo que haya puesto un énfasis especial en la energía hidroeléctrica y se haya mencionado específicamente a Aysén. En el fondo es un espaldarazo a Hidroaysén y al resto de las megarepresas que se pretenden construir en la Patagonia. Nos parece que hay un compromiso con la megahidroelectricidad que ha suscitado tanta polémica en el país. Esto es un error y una señal bastante preocupante de parte del Presidente”, afirmó Rendón.
El vocero de de Acción Ecológica concluyó que el continuar con la depredación de la Patagonia chilena a favor de la generación energética sería agudizar con el conflicto social existente en el país.