En entrevista con el programa Semáforo de Radio Universidad de Chile, el gastroenterólogo miembro de la agrupación Médicos sin marca, Rodrigo Irarrázaval, comentó que en Chile el ejercicio médico está fuertemente marcado por la propaganda y el marketing farmacéutico.
En este sentido, el profesional señaló que la industria farmacéutica y los laboratorios mantienen un campo de influencia que se evidencia, por ejemplo, “a través de los visitadores médicos”, regalos e inclusive, invitaciones a congresos.
De acuerdo a esto, Rodrigo Irarrázaval explicó que incluso los estudios en los que se basan los usos de los medicamentos también forman parte de la influencia de la industria, la que a su vez, va promoviendo remedios específicos, de acuerdo a sus análisis.
Además, Rodrigo Irarrázaval manifestó que la industria tiende a desarrollarse en base a políticas públicas.
“Por ejemplo en la Ley Ricarte Soto, toda la plata involucrada que va a haber en medicamentos de alto costo, el estímulo que hay y lo que puede significar recetar una u otra cosa. Entonces, es básicamente una influencia ejercida a distintos niveles y que influye claramente en la práctica diaria de nosotros, en los pacientes y también en las políticas públicas”, manifestó.
Médicos sin marca es una agrupación que pretende entregar una atención centrada en las necesidades del paciente y que además, busca desligarse del marketing farmacéutico.
Según Rodrigo Irarrázaval, la idea de la organización es precisamente “fomentar las buenas prácticas en la relación de la industria y el ejercicio de la medicina, específicamente en el manejo de los conflictos de intereses”, concluyó.