Errores en el decreto que regula el Plan Auge en 40 de las 80 patologías cubiertas por el programa, obligaron a la ministra de Salud, Carmen Castillo a realizar un sumario interno en la institución, además de una reestructuración en el equipo encargado de la realización del decreto.
La ministra aceptó la renuncia del médico cirujano Pedro Crocco Abalos, quien se desempeñaba como jefe de la División de Prevención y Control de Enfermedades de la Subsecretaría de Salud Pública.
No obstante, desde organizaciones de la salud manifiestan que no es un error aislado, ya que en diversas instancias se han encontrado fallas en decretos.
Izkia Siches, presidenta del Consejo Regional del Colegio Médico sostuvo que se debe tecnificar y profesionalizar cuáles son los roles de las personas que han participado en estos procesos anteriormente.
“Estas desprolijidades no son casuales, es una forma de funcionamiento del Ministerio que se hace cargo de muchas áreas, que a la vez es burocrática pero no logra obtener este control de calidad para poder hacer el trabajo bien”
La médico agregó que para mayor eficiencia en el sistema, el Estado debe comenzar a funcionar como corresponde y no solo responder a las promesas del gobierno de turno.
Para Nelly Alvarado, académica de la Escuela de Salud Pública de nuestra casa de estudios y ex secretaria ejecutiva del Auge del Minsal, elaborar un decreto es una tarea compleja que requiere tener bastantes puntos en cuenta.
“Primero hay que definir los diagnósticos del punto de vista médico, segundo se debe hacer un protocolo, una canasta de prestaciones para definir las atenciones básica y prioritarias para las personas, tercero hay que establecer un monto financiero: para eso debemos basarnos en estudios. Además, hay que decidir si la red de salud pública y privada está disponible para ofrecer garantías en ese tema y por último se debe trabajar con el Ministerio de Hacienda”
En cuanto a la resolución de este asunto, una de las opciones del Minsal es enviar un decreto que corrija los errores y agregue otras prestaciones, lo que podría estar listo recién en noviembre.
Sin embargo, esto implicaría que los pacientes que podrían exigir desde julio los nuevos tratamientos, prestaciones y medicamentos que se incluyen en las 15 patologías que recibieron mejoras, deban esperar hasta que el decreto esté completo.
Medida económica y no sanitaria
El congelamiento respecto a nuevas patologías y el aplazamiento de las fechas de acreditación de calidad de Hospitales y Clínicas para poder abordar este plan, son otras de las materias pendientes.
Recordemos que el Ministerio de Salud modificó el decreto que permitirá excepcionalmente a Centros de salud pública y privada no acreditados en calidad atender a pacientes Auge. Hasta el momento, solo 42 hospitales, 33 clínicas y tres de recintos de fuerzas armadas están acreditados por el organismo.
Respecto a las nuevas enfermedades, el diputado y miembro de la Comisión de Salud de la Cámara Baja, Juan Luis Castro manifestó que por primera vez desde la implementación de este plan no existirán patologías adicionales por lo es necesario que se den explicaciones de carácter presupuestario por esta situación.
“Creemos que el congelamiento del plan Auge en cuanto a enfermedades obedece a una medida económica y no sanitaria, y esa es la razón por la cual la autoridad económica debe expresar la verdad de lo sucedido porque esto es muy complicado por lo que requiere que se corrija esta situación o se aclare”, afirmó el parlamentario.