Una nueva caída en la confianza de los consumidores respecto del futuro de la economía es lo que reflejó la última entrega del índice de percepción de la economía, IPEC, medición que efectúa la empresa Adimark y que refleja el “estado de ánimo” de los ciudadanos sobre esta materia.

De acuerdo a las cifras correspondientes a febrero, la “percepción económica del país a 12 meses” muestra un retroceso de 5,6 puntos y se ve un deterioro además en la mirada de corto plazo de la economía.

En tanto respecto de la “situación personal”, la medición arrojó una caída de 2,2 puntos ubicándose en 37 la cifra, 13 puntos por debajo de los 50 que se considera “estado de pesimismo”. Son 33 meses que este índice no supera dicha barrera.

Sobre las causas en la caída de la percepción de la ciudadanía en la materia, los especialistas coinciden en que se están comenzando a reflejar los efectos de la desaceleración económica que afecta al país, con un crecimiento que se encuentra estancado bajo el 2 por ciento.

Esto se evidencia en la percepción respecto del empleo, donde, a pesar de que las cifras oficiales se encuentran relativamente estables en un 6 por ciento, la visión de la ciudadanía es negativa por la caída en los cupos asalariados y el alza en el trabajo por cuenta propia.

Para el economista de la Universidad de Santiago, Víctor Salas, esta percepción puede caer aún más considerando que el futuro a corto plazo no se ve auspicioso respecto del crecimiento. “Se espera que no haya una buena situación económica en el primer trimestre y creo que la gente hizo una proyección más fuerte de lo que finalmente vino a ocurrir. Recordemos que el Imacec de febrero es probable que caiga debido a la huelga de Escondida”.

Por su parte, el economista Andrés Solimano, recalcó que el gobierno ha equivocado el foco respecto de las medidas para reactivar la economía: “se abandonan los objetivos iniciales de esta administración en pos de un supuesto repunte de la economía que todavía no llega. Se sacrificó la política fiscal contra cíclica, llevamos tres años con ese enfoque y la economía no repunta y esto va a continuar porque las autoridades están convencidas de que su enfoque es el adecuado”.

Respecto del empleo, en el parlamento también ha surgido la preocupación acerca de las medidas gubernamentales para hacer frente a la desaceleración. Por lo mismo, se citó para este martes a la comisión de Trabajo de la Cámara al ministro de Hacienda Rodrigo Valdés para que dé cuenta de las acciones al respecto.

El presidente de dicha instancia, Patricio Vallespín, afirmó que las cifras oficiales no están dando cuenta de lo que se percibe en la calle: “La forma en cómo se está midiendo el desempleo probablemente pueda existir una subvaloración. No se ven muy congruentes las mediciones con la realidad y por eso tenemos que ver cuáles son las políticas globales que está adoptando Hacienda”.

Dentro de los efectos de que la confianza de los consumidores caiga se encuentra una reducción en la demanda de créditos, lo que redunda en una reducción de la oferta porque los bancos comienzan a tomar mayores resguardos, lo que termina estancando la economía.