A través de una declaración pública, la Cancillería hizo un llamado a cumplir con las mesas de trabajo conformadas en Venezuela y ratificó su disposición a colaborar con el pueblo y las autoridades de ese país para contribuir a la solución de sus desafíos políticos, económicos y sociales.
“Consideramos urgente que se atienda de manera prioritaria la liberación de presos políticos, se reconozca la legitimidad de las decisiones de la Asamblea Nacional, según la Constitución, y que se establezca un calendario electoral, que incluya las elecciones pospuestas”, dice el documento.
La posición de la Cancillería se da a conocer luego que 73 parlamentarios firmaran, el pasado martes, una carta de acuerdo solicitando que la Presidenta Michelle Bachelet respaldara la intención del Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, de suspender a Venezuela del organismo regional si no se concretan las elecciones en los próximos 30 días.
Los parlamentarios que se manifestaron contrarios a esta petición argumentaron que el régimen político de Venezuela es una democracia aunque no se esté de acuerdo con el Gobierno de Nicolás Maduro. Por lo mismo, ellos deben tomar sus decisiones y no otros países porque se trataría de un golpe de Estado, según manifestó la diputada del PPD, Cristina Girardi.
Sin embargo, el diputado de la Democracia Cristiana Gabriel Silber dijo estar conforme con esta posición que ha mostrado Cancillería, porque demuestra que Chile no sigue indiferente a la situación venezolana y se desmarca de una posición neutral que lo había caracterizado.
“Siempre nos hubiese gustado que esta posición se haya dado a conocer antes. Sentíamos que Chile estaba algo frío sobre lo que pasaba en Venezuela y con esto ya no es indiferente”, señaló.
La analista internacional Paz Milet manifestó que esta reacción de Cancillería responde a un planteamiento que se está haciendo cada vez más fuerte a nivel regional y que asumen la situación de Venezuela como una crisis humanitaria.
A su juicio, el gobierno chileno ha mantenido una línea responsable y en concordancia a los planteamientos de los distintos foros y diálogos internacionales.
Mientras, en entrevista con el periodista Juan Pablo Cárdenas, el senador Alejandro Navarro dijo que la OEA mantiene una campaña sediciosa por intentar derrocar a Nicolás Maduro. Sin embargo, insistió en que debe ser Venezuela que resuelva sus conflictos sin injerencia extranjera.
El senador comparó el contexto político de ese país con la situación chilena: “Hay oposición fuerte en Venezuela pero la presidenta Bachelet tiene 22 por ciento de aprobación, un 78 por ciento de rechazo, en Chile y el gobierno se mantiene”.
Los parlamentarios aprobaron en marzo pasado una resolución que solicitaba a Michelle Bachelet y al subsecretario de Relaciones Exteriores, Edgardo Riveros, hacer las gestiones para pedir la libertad del diputado venezolano Gilber Caro, opositor al Gobierno de Nicolás Maduro.